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Excelentes temas muy importantes y valiosos en este campo de la sinodalidad de la Iglesia, muchas gracias
La sinodalidad es sinónimo de universalidad, tal y como lo vemos en los videos que nos acercan al tema en los cinco continentes. Mil gracias
La sinodalidad demuestra que el amor a Dios no conoce ni de culturas, ni de liturgias. Todos hermanos en la Fe en nuestro Señor, en cada una de nuestras realidades y manifestaciones.
No caben ni clases ni categorías en el amor a Dios. Jesucristo es el alfa y el omega, y cada uno en su ámbito debe tender y entregarse a el. Sinodalidad es recuperar la idea de Eclessia, como verdadera comunidad de fieles.
Dios os bendiga¡¡¡¡
Los fundamentos de la sinodalidad son aplicables y deseables en cualquier ámbito de la vida: trabajo, estudios, comunidad o cualquier otro colectivo social.
Me pregunto ¿acaso hay algo particular o distintivo en la práctica sinodal en la iglesia? ¿Pueden haber sinodalidad sin el espíritu cristiano?
Sin duda, el Boston College nos está ofreciendo una riqueza extraordinaria sobre la sinodalidad y enseñándonos a “aprender” a conjugar el verbo “sinodalizar” en todos los aspectos de nuestra vida, para seguir comprometidos con una Iglesia sinodal a todos los niveles, aunque todavía, en algunas partes la veamos aún bastante lejana. Es la lucha del Espíritu que nos empuja al viento del aire fresco que nos ofrece el Papa Francisco y las enriquecedoras experiencias de sinodalidad que ya se viven en algunos sectores de nuestra Iglesia. Muchas gracias y abundantes bendiciones para seguir en la lucha diaria por una Iglesia sinodal.
El camino sinodal es un viaje entre iguales y en esa medida debemos superar el clericalismo que se convierte en una piedra en este caminar. El evangelio de Jesús es la guia para hacer de la iglesia una iglesia servidora y llena de esperanza.
Quisiera compartir una reflexión que me surge desde el observar estos videos. pienso que la Iglesia en América Latina desde la colonia (ver por ejemplo los sínodos limenses y mexicanos del siglo XVI y XVII) uno de los temas centrales fue la cuestión del indígena . Si damos un salto gigante en el tiempo, descubrimos Obispos como Elias Proaño en Ecuador, Samuel Ruiz en Chiapas, México, Pedro Casaldáliga con los Amazónicos del Brasil y un largo etc, odríam este devenir histórico, da cuenta de que en éste continente existe larga data de una iglesia indigenista y profética, en un contexto donde las relaciones coloniales en un primer momento de nuestra historia y luego de expoliación de un sistema económico (como recuerda el papa Francisco en Laudato Si) han expresado al interior de la Iglesia dos modelos de vivir el cristianismo. Sin duda que el modelo profético es el que más se acerca a la sinodalidad. En particular con los pueblos originarios se requiere de gran creatividad, paciencia y mucha humildad, como de una profunda ética cristiana donde el dialogo y la escucha sinodal no sea desde una posición de “Señorío” o paternalismo para continuar con un método comunicativo subalternador… seguir construyendo el Reino de Dios, continua siendo un profundo desafío evangelizador y la sinodalidad es pieza clave en dicho proceso
LA SEGUNDA SEMANA HA PROPUESTO MAS CLARIDAD EN EL CONTENIDO DEL CURSO, ENRIQUECIDO POR EXPERIENCIAS CONCRETAS DEL CAMINO SINODAL A NIVEL UNIVERSAL.
QUEDA EL COMPROMISO DE COMPARTIR EN EL MEDIO DONDE ESTOY .
AGRADEZCO ESTA MARAVILLOSA OPORTUNIDAD , DE SENTIRME PARTE DE LA IGLESIA SINODAL DEL TERCER MILENIO, UNA BUENA PREPARACIÓN A LA CUARESMA. BENDICIONES.
Escuchar todos, la historia, los aportes y contribuciones a la Sinodalidad produce en mi una cierta sensación de satisfacción al constatar que en la Iglesia Latinoamericana, como en las otras iglesias de cada continente, venimos caminando con estructuras eclesiales que han permitido un gran progreso en este desafío que implica la Sinodalidad. Los retos son los mismos, luchar en contra del Clericalismo pero también luchar para que los Laicos asuman con valentía el compromiso bautismal como una opción de vida fundamental y radical. Gracias por todos los aportes
Excelente curso, nos permite salir del oscurantismo y comprender el verdadero significado de la sinodalidad como práctica de vida.
Buen diseño del curso, sobre todo el compartir experiencias de los distintos continentes. Nos permite ver las similitudes y diferencias en nuestra prácticas de vida eclesial.
Excelentes presentaciones. La Sinodalidad no es otra cosa que Communio, algo totalmente indispensable en la vida de la Iglesia como Pueblo de Dios, sin distinciones de ningún tipo, es en el espíritu sinodal donde la Iglesia debe inspirarse siguiendo las enseñanzas del Evangelio y las exhortaciones apostólicas, todos, sin distinción, debemos sentirnos parte de ese espíritu sinodal, todos los cristianos somos Iglesia.
Interesante comentario Elialva.
La Iglesia está llamada a desinstalarse de su institución para asumir el mundo desde una actitud de despojo, tal como Jesús lo hizo, pues de otra manera no podrá renovarse conforme a los signos de los tiempo lo urgen. Cuidado en que la sinodalidad sea un vocablo más en nuestra jerga intelectual y no una nueva forma de vida en la Iglesia.
Primeramente, gracias por este espacio profundo de conocer más sobre sinodalidad y las diferentes posturas de los ponentes de varias partes del mundo.
Hay mucha riqueza en los vídeos, pero me impactó la experiencia del origen de la sinodalidad en Europa por Christian Bauer bajo la sombra penosa de los abusos sexuales de eclesiásticos y la experiencia histórica de las Escuelas Residenciales para indígenas en Canadá. Ante tales, hechos, la Iglesia (como pueblo de Dios) debe callar, pedir perdón por tantos males históricos y resurgir con humildad y buen testimonio para ser creíbles ante el mundo. Desde la prepotencia y el clericalismo no podrá ser luz del mundo y sal de la tierra, tal como lo quería Jesús.
Esta primer semana ha sido enriquecedora por aprender a caminar con mi comunidad valorando los conflictos que vivió la primera comunidad y que constituyó toda una experiencia de sinodalidad.
importantes contribuciones para la iglesia, me recuerdan las palabras del filosofo francés Michel Henry en su obra Palabras de Cristo, cito textual, “la naturaleza de Cristo es doble, humana y divina a la vez. En la medida en que Cristo es la Encarnación del Verbo de Dios es dicho Verbo, y de este modo Dios mismo es quien habita en él. Pero dado que la carne en la que el Verbo se encarnó es semejante a la nuestra, Cristo es en tal caso un hombre como nosotros. Al revestir nuestra condición asumió al mismo tiempo su finitud”
He disfrutado mucho con la escucha y reflexión sobre todos conocimientos que nos han aportado en esta segunda semana.
ESTA SEGUNDA SEMANA DEL CURSO NOS ENSEÑA QUE SI ES POSIBLE CAMINAR JUNTOS EN NUESTRA IGLESIA.
ME DA MUCHO GUSTO VER LA APERTURA Y CONVENCIMIENTO DE OBISPOS Y SACERDOTES EN ESTE CAMINO SINODAL
Muchas gracias por todos los aportes que nos brindaron en los temas de esta semana. Todos los expositores me parecieron muy importantes.
Entre las resonancias que me quedan son que debemos saber escuchar no sólo para aumentar nuestros conocimientos, sino para poder tener la capacidad de conversión, unidad y solidaridad. Creo que una escucha no sólo de sonidos, sino desde la contemplación y la acción, en cercanía con el Pueblo de Dios en donde todos somos un Don para la Iglesia; llenos por la gracia del Espíritu Santo.
Soñar con una Iglesia en donde no sólo sea clerical, sino que también los laicos comprometidos tengan voz y voto.
Considero que estuvo muy bien expuesto en resumen, el camino sinodal de la Iglesia en América Latina, en donde intentamos “vibrar con las necesidades de los más pobres y desprotegidos”. El ejemplo de las religiosas que se les asignó una parroquia en Uruguay también lo vi y experimenté en mi misión pastoral en Ecuador. Ahora estoy en México, en una Iglesia en donde gracias a Dios hay muchos sacerdotes, pero poca inclusión de la Vida Consagrada en la pastoral. Aquí nos falta aún más “experimentar la austeridad para poder abrirnos a la riqueza que Dios nos da” .
Hola Cris, soy Toñito de Ecuador te cuento que recordamos mucho el camino sinodal de Mons.Leonidas Eduardo Proaño con los pobres, me llamo mucho la atención tu comentario al que podria agregar lo que pude ver del camino sinodal en Canada donde se pone en practica el circulo de la escucha (tradicion ancestral del pueblo indigena ) para sanar y reconciliar heridas profundas ; bueno y tambien algo de Europa donde escuche que el P.Francisco subestima este problema espiritual de la política de la iglesia llamado “tribalismo asimetrico” lo escucho por primera vez aunque es muy viejo este problema .Es un camino en el que estamos aprendiendo muchisimo con la ayuda del Espiritu Santo
Las exposiciones me han ayudado a reconocer la vida de nuestra Iglesia, con sus luces y sus sombras. Caminando juntos, escuchándonos y, sobre todo, escuchando la voz del Espíritu, haremos que nuestra Iglesia sea LUZ y SAL para el mundo.
Para lograr que el pueblo de Dios entienda, acepte y viva la sinodalidad considero necesario llevarle el conocimiento del contenido del Vat II, su desconocimiento hace cuesta arriba un caminar juntos, sin saber de dónde salen las acciones a tomar . Si, estamos en sinodalidad en algunos lugares a pesar del clericalismo imperante, pero debemos evangelizar y dar a conocer el Vat II además de la Palabra de Dios. El contenido de estas dos semanas han aumentado mis esperanzas y deseo de servir como laica comprometida, gracias.
Experimentar y vivir este acontecimiento Sinodad es una gran riqueza para la Iglesia “Pueblo de Dios”. Es volver a los origenes.
Todos los conferenciantes resultan muy interesantes, ya que hacen una gran profundización en los temas que más se están tratando actualmente y que más preocupan a todas las personas que se sienten parte de la iglesia a todos los niveles.
Hay una gran insistencia en la igualdad de los bautizados como el criterio estructurante para la configuración de todos los sujetos eclesiales. De esta manera se retoman las enseñanzas del Concilio Vaticano II y reconociendo a todo el Pueblo de Dios como sujeto que tiene que discernir en este camino al que estamos invitados. Es un reto que hay que trabajarlo diariamente.
Siguen insistiendo en que las mayores dificultades son la jerarquía y el clericalismo, también clericalismo por parte de laicos y laicas, que está costando mucho cambiar estas estructuras y manera de actuar.
Muy importante seguir insistiendo en el discernimiento en comunidad, porque es imprescindible para crecer en Sinodalidad y así poder realmente caminar juntos en nuestra Iglesia. Es necesario creer que la Sinodalidad es para vivirla a lo largo de toda la vida.
Hay que tener muy presente que la Sinodalidad es seguir el Evangelio y que el Evangelio es un camino de vida, en todo momento de la vida cotidiana.
También valoro las aportaciones de los compañeros.
Muchas gracias a todos los ponente y compañeros que están ayudando a seguir en este camino.
En este nuevo bloque, podemos ver que la Sinodalidad es como todo lo del Espíritu Santo, una consecuencia necesaria, del devenir de la historia de la Iglesia y también del plan salvífico del Señor. La Iglesia ha vivido momentos en los cuales ha requerido maximizar la escucha al Pueblo de Dios y poner en práctica cosas puntuales, por ejemplo la Adoración del Santísimo Sacramento en la época medieval. Pero eran cosas transitorias que no iban acompañado de cambios estructurales y eclesiológicos, donde el clericalismo no siguiera controlandolo todo. Hemos visto los cambios en materia de Derecho Canónico que se han escrito pero no cumplidos, también los que deben escribirse e implementarse.
Resulta interesante escuchar las diversas experiencias en el mundo, que buscan hacer vivir el Concilio Vaticano II, que ya recopilaba las exigencias del pueblo de Dios, pero al verla desde una óptica solo clerical, parecían muy difícil de cumplir. Pero las experiencias nos demuestran que eso esta cambiando y lo mas hermoso, es que sin crear divisiones o problemas.
Buenas tardes a todos.
Como todos, muchas gracias por este curso de sinodalidad, en el que se nos descubren claramente, los dinamismos del diálogo que debe darse en la Iglesia de todos los laicos, a partir de la eclesiología de vaticano II, en la que todos los fieles debemos ser parte activa del proceso de cambio en la Iglesia, ante los diferentes acontecimientos que hoy día, piden una respuesta de la Iglesia, y en la que se debe iluminar con el Evangelio de Cristo. La sinodalidad ciertamente es un proceso que lleva tiempo, deberá ser formativo para generar nuevas actitudes en todos y cada uno dentro de la Iglesia de Cristo, para producir esa transformación y ser testimonio.
R.A.
Temas iluminadores, ojala nos ayude a los creyentes a tomar conciencia de ser pueblo de Dios, su familia, que ha de caminar unidad, con criterios claros y de acuerdo al magisterio, y los contextos particulares. Entender la sinodalidad nos permite igual comprender y descubrir quienes están en la agenda de la división y la falsa doctrina, generando desinformación y caos al interior de la Iglesia. Hoy más que nunca debemos caminar en unidad frente a un mundo que busca fraccionarnos.
El caminar juntos nos permite a llegar más lejos que caminando solos. Es un reto para ser humilde en la escucha y discenirmiento; exige paciencia para relentar el paso, compasión para esperar al otro que va más lento y motivarlo a seguir adelante o acelerar el paso, al igual que docildad para dejarse guíar y motivar, impulsar y, a veces, arrastrar al otro: cuando se está demasiado cansado, desesperanzado y/o desilucionado.
Con soberbia, clericalismo, orgullo o autosuficiencia no se puede caminar juntos (vivir la sinodalidad) y se quedaría en un ideal o bello deseo. Es por ello que para que esto sea un HECHO en nuestra Iglesia se requiere la conversión personal que lleva a la conversión pastoral.
El primer paso para buscar la salud es reconocer que se está enfermo, que algo anda mal o funcionando irregularmente; que hablemos de sinodalidad es el inicio de esta toma de conciencia que desembocará en una comunidad como la de Jesús con sus apóstoles.
Quisiera compartir dos puntos que me párese importante resaltar. El primero trata de la riqueza que las pequeñas comunidades han aportado en el camino sinodal de manera notoria en Africa y Asia. Pequeñas comunidades enraizadas en la cultura y los desafíos propios de cada sociedad. El segundo punto tiene que ver con el clericalismo cuyas consecuencias han traído, como toda institución humana fracturada por el pecado, situaciones difíciles y hasta vergonzosas. Pero a mi forma de ver no es la única causa de el terrible crimen de los abusos perpetrados por sacerdotes y religiosos y laicos. Sin pretender quitar responsabilidades entre los miembros de la jerarquía eclesiástica. Este terrible pecado no siempre fue abordado por comportamientos negligentes. Si también no pocas veces por falta de comunicación y aveces confusión y desatino de cómo manejar estos casos. La experiencia en Europa a mostrado en algunos círculos laicales y hasta del clero un marcado comportamiento anti jerárquico que podría desafortunadamente, llevar a desviaciones que no son parte del camino sinodal
Hola, Cristian. Gracias por tu comentario. Sin duda Leonidas Proaño fue la figura pionera en Ecuador de una Iglesia sinodal en su Diócesis de Riobamba; como lo fue también Gonzalo López Marañón en el Vicariato de San MIguel de Sucumbíos en la Amazonía ecuatoriana; y lo siguen intentado en los Vicariatos amazónicos. Esperemos que el impulso del Papa Francisco y el soplo del Espíritu haga que ese espíritu sinodal se vaya extendiendo por todas las Diócesis.
Y sin duda, la Asamblea Eclesial Latinoamericama y del Caribe del año antepasado, fue un real ejercicio de sisnodalidad de la Iglesia Latinoaamericana.
Excelente curso.Muchas gracias por este curso de sinodalidad. Entiendo que la “sinodalidad” no solo debe ser una FORMA DE COMPORTAMIENTO DE LA IGLESIA CON EL PUEBLO DE DIOS, SINO ADEMAS UNA :”forma de ser”, ” un estilo de vida” todo cristiano.
El presbítero, teólogo, sociólogo y escritor católico francés, Michel Quoist;(Le Havre, 18 de junio de 1921—ibíd., 18 de diciembre de 1997) escribió en su libro “Triunfo”
_”Tu cristianismo no es primer lugar
un conjunto de ritos religiosos,
una ley moral,
una doctrina
sino una VIDA
No seas solo un practicante sino, un VIVIENTE”
En fin, la sinodalidad, es la “Continuación de Cristo”en nuestra manera de vivir en el mundo.
La Sinodadildad
Es una corresponsabilidad en el rol de evangelizadores que todo bautizado esta llamado a realizar.
Muchas veces juzgamos a los religiosos pero cuando se trata de estudiar, prepararnos y hacer vida las enseñanzas de Cristo, muchos católicos corremos. Pedimos espacios pero una vez que nos los dan no nos asumimos como un Pueblo de Dios que esta llamado a la evangelización, este curso me da grandes esperanzas de que como católicos despertemos y escuchemos el llamado que Dios nos hace a participar y colaborar hombro con hombro con los religiosos consagrados y a algunos de ellos a practicar la humildad que el clericalismo les ha arrebatado, como dice san Agustín “En la escuela del señor todos somos condiscípulos”. Que sigamos avanzando en la Sinodalidad para el bien común de la humanidad.
Que el Espíritu Santo continue acompañandonos en este proceso . Gracias
Saludos desde Querétaro
Hola a todos.
Sin duda las ponencias y experiencias escuchadas, aumentan la esperanza de construir un camino sinodal, una de las palabras que me resuena es “todos uno en Cristo”, dignificando la presencia importante y necesaria de todo el pueblo de Dios.
Pero también una pena que esta reflexión de Sinodalidad se diera como consecuencia de los abusos en la iglesia, por ende necesita el compromiso y conversión de todos para ser la iglesia que el Señor nos pide.
La sinodalidad nos ha traído el aire fresco del Espíritu en nuestra iglesia, asumiendo los desafíos del Concilio Vaticanos II, volviendo a las fuentes del Evangelio y de la llamada de Jesús a caminar juntos en la construcción del Reino en nuestras realidades.
Saludos cordiales desde República Dominicana 🇩🇴!
“Una iglesia en camino sinodal hacia las periferias” me encantó esa expresión, es un llamado a evangelizar con un corazón abierto, tratando de discernir en conjunto para acompañar a nuestro Papa Francisco que movido por el espíritu santo nos invita a emprender una renovación de nuestra iglesia católica proponiendo que nuestros líderes abran sus corazones y den pasos reales para que los sectores menos tenidos en cuenta dentro de nuestras comunidades Eclesiales , logren alzar sus voces y sean escuchados .
Tenemos grandes retos pero si verdaderamente queremos que las nuevas generaciones se integren a nuestra iglesia católica, sabemos que debemos ampliar nuestros horizontes y transformar las condiciones negativas que se han dado a través de los siglos por representantes de la curia que no fueron fieles a nuestro señor y su palabra .
Acciones más que palabras !
Muy de acuerdo, debemos pasar de las palabras a los hechos .
Debemos ver las ideas convertidas en realidades dentro de nuestras comunidades y que se sienta y se palpe que estamos transformando nuestra amada iglesia católica, 🇩🇴
Boston college está haciendo unos aportes maravillosos al proceso sinodal de nuestra iglesia!
Mil gracias por ese maravilloso deseo de ser proveedores de formación de calidad ( y sin costo para todos nosotros 👏👏👏👏👏👏)
Dios les bendiga! 🇩🇴🇩🇴🇩🇴🇩🇴🇩🇴🇩🇴
Las reflexiones ofrecidas durante esta semana han sido de mucha riqueza para ir caminando hacia la sinodalidad en nuestra Iglesia y con los demás, bien sea pertenecientes a la Iglesia o quienes avanzan por otros caminos de fé y de cultura .
Muy interesantes las reflexiones en torno la las Iglesia particulares, con rasgos espirituales y culturales propios, avanzando en la Sinodalidad en unidad dee vínculos eclesiales. La riqueza de esta identidad la hemos podido ver con claridad en los aportes que las comunidades procedentes de Africa, Asia, América Latina, Europa,América del Norte, dan al estilo sinodal, y los retos que cada afronta een este tejido común de la sinodalidad.
Las explicaciones sobre el sensus fides nos han puessta de cara a la acción del Espíritu que actuando en cada uno, permite llevar procesos de discernimiento y toma de decisiones no en forma pasajera sino en forma permanente en la marcha hacia la conversión personal , comuniaria, eclesial y hacia laa reforma soñada dee la Iglesia.
Enfocados en una Iglesia misionera… en la que seremos misioneroos si estamos unidos a Jesús y si salimos para anunciarlo en humildad, escucha, respeto, pequeñez….
Muchas gracias por la riqueza que hemos recibido
Buenos días Carlo, ante la pregunta que planteas, desde mi experiencia con personas que no profesan religión alguna, son vivo ejemplo de un “caminar juntos”, con un diálogo compartido y en respeto total de toda creencia.
Saludos
Buenos días Nona, te recomiendo que leas: MENSAJE DEL SANTO PADRE FRANCISCO
PARA LA CUARESMA 2023.
Está extraordinario en clave sinodal.
Saludos
Buenos días, en mi parroquia tuvimos una excelente experiencia en clave sinodal a principios de los años ochenta cuando el Obispo auxiliar Monseñor José María Aguilera nos invitó a varios laicos a “caminar juntos” para la construcción de la VI Vicaría de San José y la parroquia.
Siempre nos decía, el trabajo pastoral nos toca a los sacerdotes y a mí. La edificación, recaudación de fondos, administración del dinero les toca a ustedes.
Es la mejor manera de avanzar unidos en la edificación del Reino.
Saludos
Gracias a todos/as. Me ha llenado de confiada Esperanza, el compartir vuestras enseñanzas provechosas en el Camino de la Sinodalidad.
Dice así la Dra. Carmen Peña: La Sinodalidad no es sólo un estilo y modo de hacer las cosas en la Iglesia.
La Sinodalidad no se agota con la celebración de los Sínodos, sino que se lleva a cabo cada día en la vida de la Iglesia, en la Misión como Pueblo de Dios, peregrinos en Camino.
Significa una total radicalidad del Pueblo de Bautizados, en la Misión de la Iglesia, desde la corresponsabilidad en su acción Pastoral y en el desarrollo de la tarea Evangelizadora de la Iglesia.
Todos estamos llamados a través del Espíritu, a anunciar y dar testimonio del Evangelio, allí donde el Espíritu de Jesús, nos alienta con su Amor y nos va guiando, al encuentro fraterno con los otros.
En total acuerdo, con la función insustituible del Papa, asi como los Obispos y Sacerdotes, miembros también del Pueblo de Dios y guías como Pastores de la Iglesia, al servicio de los bautizados, hermanos/as en Jesucristo.
Si el clericalismo a ultranza, ignora la presencia necesaria e importante de los laicos/as en la Iglesia, está tomándose la autoridad recibida en el Ministerio, no como Amor y SERVICIO, sino sirviéndose llevado del propio interés y beneficio, perdiendo así, la autoridad recibida a través del Sacramento, que no debe ser otra, que ser Pastores solícitos, servidores del Evangelio, en la atención y cuidado de las ovejas.
Con la misma comprensión debemos entender los laicos/as, la anarquía que supondría negar, la presencia de los Consagrados al Servicio y Misión de la Iglesia, tratando de sustituirles en su vocación, singular e imprescindible.
El Espíritu reparte Carismas y dones, todos son valiosos y fecundos, si hubicamos el espacio y digna tarea a desarrollar, desde la entrega en el mejor Amar y servir al Pueblo de Dios, nuestros hermanos/as.
Me ceñiré sin dispersarme en otras cuestiones y temas, sin duda, interesantes y provechosos, a la decisión otorgada desde la Curia Romana, haciendo referencia a la Evangelización como Misión y tarea del Pueblo de Bautizados.
Es de agradecer profundamente, la disposición que el Papa Francisco ha promulgado al respecto: todo Bautizado, hombre y mujer, tienen pleno derecho y están autorizados, para Anunciar y Proclamar el Evangelio, respondiendo con su personal Sí, a la llamada de seguir a Jesús.
Es el gran regalo del Espíritu, para los hombres y mujeres del Siglo XXI. Carisma recibido, cuya credencial es, sentirnos portadoras de llevar la “mirra” del Evangelio, su bálsamo sanador, a la Humanidad herida, que está sufriendo a causa de tantos males y pecados.
Seguimos reflexionando, escuchando atentas la acción del Espíritu en nosotras, “Miróforas” del Amor al Evangelio, en Jesús Resucitado.
Un abrazo fraterno, ¡Adelante!.
Miren Josune Martínez Azkona.
El camino que propone la iglesia Sinodal en diferentes partes del mundo, me lleva a comprender que todo es un proceso, conversión, escucha, comunión, son la guía del Espíritu Santo. para ser una Iglesia humilde y formativa para el Reino de Dios.
Gracias por las aportaciones de los compañeros y de los videos.
Gracias a Boston College por este curso, los temas, las experiencias son de gran riqueza.
Quiero hacer referencia a la acción del Espíritu Santo en cada persona, en el proceso de fe, hace vivo el encuentro con Cristo en la Eucaristía, en la escucha de la Palabra, es el Espíritu que vitaliza nuestra fe y abre cauces para expresarla, celebrarla,, proyectarla en el campo social, también nos da un sentido de pertenencia a la comunidad.
Gracias a todos quienes a compartido sus reflexiones.
Que el Espíritu, siga fortaleciendo a nuestro Papa Francisco, en esta acción empezada de renovar a la Iglesia, haciendo de ella, el espacio, donde todos como bautizados, somos digno e iguales.
Sor Mariangel, efectivamente los temas presentados son muy importantes y nos están ayudado a comprender mejor lo que es la sinodalidad de la Iglesia.
Reconocer la pluralidad y universalidad, ser una Iglesia que escucha que es más que oír para saber, hacerlo individual primero y después juntos, hay que discernir para saber que hacer con lo que nos dice el Espíritu Santo. Él sopla donde quiere, nos guía y nos da fuerzas para seguir el camino.
La sinodalidad nos llama a dialogar con todas las religiones y con la sociedad.
Todos y cada uno somos protagonista, corresponsable, escucha, discierne en comunidad por una Iglesia sanadora y misionera y como dice el Papa Francisco en peregrinación hacia el Reino.
Muchas gracias a los y las conferenciantes y a los participantes por las aportaciones que nos aclaran y enriquecen.
justamente eso es lo que más interesante me pareció de todos los videos. Algunos comentarios de los continentes se quedaban en la estructura aunque intentando una forma nueva, otros sin embargo aportaron desde una practica (Africa, Canadá y Europa) muy enriquecedora
Me han resultado muy interesantes y aclaradoras las conferencias de esta semana.
Como las iglesias sinodales comienzan desde los sínodos parroquiales.
Lo que afecta a todos hay que resolverlo con todos escuchando al Espíritu Santo.
La Iglesia es infalible en creer cuando coincide la opinión de todos en un tema, el Espíritu lo guía en la verdad y lo relaciona con la divinidad.
Todos somos iguales en dignidad y corresponsables en la misión evangelizadora.
Las experiencias que han comunicado me dan mucha esperanza al conocer como en muchas comunidades que trabajan o empiezan a hacerlo en sinodalidad, gracias a Dios.
Muchas gracias por vuestro trabajo
Los aportes de cada uno de los que nos compartieron su vivencia de Dios en la Iglesia, nos llevan a “re-visitar” el Concilio Vaticano II. A que podamos recuperar aquellas propuestas que marcaron la “primavera de la Iglesia”.
Iglesia: pueblo de Dios, peregrina y misionera por esencia, que invita-convida al diálogo en un mundo plural, llamada a un diálogo profético , en la que todos son discípulos misioneros y todos participamos de la misión evangelizadora.
Esta visión de Iglesia nos lleva a replantearnos muchas cosas, entre ellas: las relaciones horizontales (comensalidad), la misión conjunta, la ministerialidad, la participación de las mujeres, revisar el camino recorrido y replantearnos hacia dónde quiere llevarnos el Espíritu (conversión pastoral)……
Podría seguir diciendo muchas cosas pero concluyo con dos:
– Muchas Gracias por este espacio tan enriquecedor;
– asumamos el compromiso de nuestro bautismo.
Hasta otro momento…….
No debemos olvidar que la Iglesia es Pueblo de Dios, fuente de verdad, siempre y cuando sea conjuntamente asimilado como Cuerpo Místico de Cristo. No se deben separar estos dos conceptos del camino sinodal de participación en la Iglesia.
Muchas felicidades, saludos y bendiciones.
La Sinodalidad debe formar parte del quehacer cotidiano, en el hogar, el trabajo, la Iglesia, la comunidad. De tal manera que anunciar y servir a Cristo, se realice con el Testimonio de Vida. Con la disposición a la escucha del otro, en un clima de corresponsabilidad y participación. Poniendo nuestros Dones y Carismas al servicio de todos, de tal manera que Todos seamos beneficiados en la Construcción del Reino de Dios en la Tierra
si Toñito, soy Cris.
La verdad es que tengo muchos años y es la primera vez que siento que llegamos a algo con más personas en el mundo. Desde Argentina tuvimos una etapa donde vivimos el ardor y la pasión por los encuentros bíblicos junto a Javier Saravia, Carlos Mesters, el Negro Cisterna, Luis Coscia y más que nada Virginia Betancur de Uranga con su increiblemente avanzada idea de ecumenismo y su Centro Biblico Ecuménico. Hoy parece que el tiempo alcanzó al proyecto..en esos años parecíamos los raros porque leíamos la Palabra en çomunidades pobres donde además la gente representaba los textos y los ligaba a la vida. Tiempos de oro que parecían haber quedado en el recuerdo….
Celia creo que esta muy bueno tu punto de vista, gracias.
Creo que en la parte de America Latina podrían haber comentado algunas cuestiones que se dan en la práctica de comunidades locales que quizá ni siquiera se conocen a nivel diocesano, pero hay zonas donde los encuentros de Lectura Bíblica se sostienen en el tiempo y son quincenales. Mi experiencia es del lugar en donde vivo, Beccar, Provincia de Buenos Aires pero sé que hay otras experiencias similares en varios lugares.
La sinodalidad abre el camino para combatir al clerocalismo, pues el abuso sexual de parte de algunos sacerdotes hacia algunos servidores laicos de la Iglesia, viene a opacar el trabajo que en su mayoría ejercen los buenos servidores de Dios.
Estoy de acuerdo contigo, Hermín.
Nico, seminarista de la diocesis de Lomas de Zamora, Argentina.
Me gustaron mucho los videos de esta semana y estoy muy agradecido a todos y todas que hacen posible este curso.
La Dei Verbum pone de manifiesto que la revelación divina esta al servicio de la salvación humana (7a). Tanto la Escritura como la Tradición (los dos modos de trasmisión del Evangelio), persiguen el mismo fin, que es el hombre viviente (9a). La tradición es un acto porque lo que se busca es trasmitir una vida vivida con el Señor (que es trasmitir al Señor mismo), y el Dios que se revela es un Dios que se muestra y que se esconde. La Revelación consumada en Cristo se trasmite a través de dos sujetos: un sujeto histórico, la Iglesia y un sujeto trascendente, el Espíritu Santo. Todo lo que Dios revelo lo encargo a la Iglesia ,porque ella es signo de credibilidad “creo en la Iglesia”, (D(H) 3010; Dz 1794) para que sea trasmitido, pero sin la tarea del mismo Dios esta tarea seria imposible ya que la revelación divina supera las capacidades meramente humanas y es aquí donde “entra” el Espíritu Santo, quien auxilia a la Iglesia toda no solo para trasmitir sino a progresar en el entendimiento de aquello que le fue revelado (DV 5 y 8D). Como es el Espíritu el que habla al espíritu y hace comprender la Palabra, la tradición progresa mediante la asistencia del Espíritu Santo desde el principio con los apóstoles y por la predicación de los sucesores de los Apóstoles (que por este mismo Espíritu poseen el carisma de la verdad y la enseñanza) y, además, por la contemplación, el estudio y la experiencia religiosa de los creyentes (DV 8D). Es el Espíritu Santo en la Iglesia, por ser ella signo e instrumento (LG1), y en el mundo, hace resonar el Evangelio e introduce a los creyentes en la verdad. Es el Espíritu y su misma fuerza la que hoy vivifica a la Iglesia y hace posible este camino sinodal. Implica no solo “enseñar” lo que se recibió, sino que el Espíritu la asiste en la recepción de la revelación y en su comprensión y penetración a fin de progresar en el conocimiento y la entrega del misterio salvífico. Esta tarea de entrega, que implica su dinámica propia, es obra de toda la Iglesia, de todos los fieles en vinculación con los que están encargados de predicar la Palabra y cuenta la Iglesia con la garantía de la sucesión apostólica. La Iglesia en cuanto sepa dialogar con todos será un signo de credibilidad (GS 92) no hay nada verdaderamente humano que no encuentre eco en su corazón y el testimonio que hace creíble al cristiano es el amor. El Espíritu Santo asiste para que la Palabra de Dios sea comprendida y vitalizante para responder a los acontecimientos actuales.
El creyente que adora a Dios posee una fe abierta a nuevos mensajes divinos, nuevos signos. Esto lleva a una actitud de escucha para con los hombres y mujeres de Dios y movidos, por el Espíritu, el y la creyente se adhieren con confianza. La dinámica de la fe implica por un lado un encuentro personal con el otro, también en la revelación implica confianza y asentimiento, se desarrolla de un modo único en cada persona; pero a la vez implica una fe comunitaria, inserta en una comunidad por la que se recibió la Palabra y con la que comparto el misterio de Dios.
En la historia de la fe se hace camino de creyentes, la revelación y la respuesta de fe están insertas en la historia y en comunidades concretas (locales); anclada en la historia por Cristo, pero ya esperada como promesa desde los primeros padres. La fe es la Revelación recibida, el gesto acogido y respondido como propio gesto.
Jesús es mediador definitivo ante Dios, su intervención es eterna. A Cristo nos unimos para creer, participamos de su modo de ver (Lumen Fidei 18); es en su cuerpo, la Iglesia, en donde el creyente vive su fe unido a Cristo y a los demás (Rm 12,4-5). La fe, entonces, tiene una configuración necesariamente eclesial.
El contenido es para dar la vida y la vida siempre tiene que tener un contenido. La fe es alguien en quien creer (DV4). El creer es parte de la experiencia vital es esperar amando y es entregarte a alguien. En las cosas de Dios no alcanzan las razones para entregar el corazón.
Por otro lado, tenemos que seguir dialogando y buscar formas concretas sobre la forma, participación y la inclusión de las mujeres en la Iglesia. Una católica conversa Veronique Levy dice:
“Fue en el seno de la Iglesia como el Señor me coronó con su Amor indefectible. ¿No ves que el corazón de esta Iglesia a la que acusas de ser un feudo de hombres abusivos y ebrios de poder es el corazón de una Mujer? En el principio latía ese corazón. Y en ese corazón, el Corazón de Dios. Se hizo Carne de su carne. De la carne de su corazón. Para unirse a nosotros -a nosotras las mujeres, a nosotros los hombres- bajo el himen intacto, en el santuario de nuestra concepción.
La Iglesia viene -viene eternamente- desde más allá de la predicación de los apóstoles. Ella brota de un Sí, el Sí una joven de Nazaret, una joven discreta cuyo Ecce [He aquí], cuyo Sí [Fiat] y cuyo Magníficat abrieron el camino del Cielo. En Ella, con Ella, la Humanidad atravesó el horizonte de la muerte y penetró el velo de la luz. Esa Luz se hizo Carne en su carne.
Hace dos años, el Santo Padre proclamó que el lunes de Pentecostés sería la fiesta de María, Madre de la Iglesia universal, significando que la vocación de la Mujer es, en el corazón de esta Iglesia de las Postrimerías, la de una fecundidad sobrenatural: “No tiene a Dios por Padre quien no tiene a María por Madre”.
Para mejorar la sinodalidad en México, es necesario fomentar una cultura de participación y colaboración entre los líderes y los miembros de la iglesia.
A continuación, presento algunas sugerencias para mejorar la sinodalidad:
Promover la formación en sinodalidad: Es importante que los líderes y los miembros de la iglesia estén capacitados en los principios de la sinodalidad y cómo aplicarlos en su vida diaria. Se pueden ofrecer cursos y talleres sobre la sinodalidad para fomentar la comprensión y la práctica de esta virtud.
Fomentar la participación: Es importante que todos los miembros de la iglesia se sientan incluidos en el proceso de toma de decisiones. Se pueden crear espacios de diálogo y consulta donde se escuchen las opiniones de todos y se llegue a un consenso en las decisiones importantes.
Fortalecer la colaboración entre los líderes: Es fundamental que los líderes de la iglesia trabajen en equipo y en un espíritu de colaboración para promover la sinodalidad. Se pueden crear espacios de reunión y reflexión en los que se discutan los temas relevantes y se lleguen a acuerdos en común.
Escuchar a los fieles: Es importante que los líderes de la iglesia escuchen las necesidades y las opiniones de los fieles para tomar decisiones que respondan a sus necesidades. Se pueden crear encuestas y grupos de discusión para conocer la opinión de los fieles sobre temas relevantes.
Promover la transparencia: Es importante que los líderes de la iglesia sean transparentes en sus decisiones y acciones para fomentar la confianza y la participación de los fieles. Se pueden publicar informes y estados financieros para que los fieles puedan conocer la gestión de la iglesia.
En resumen, para mejorar la sinodalidad en México es necesario fomentar la participación, la colaboración y la transparencia entre los líderes y los fieles de la iglesia. Esto requiere un esfuerzo conjunto de todos los miembros de la iglesia para promover una cultura de diálogo y colaboración que permita tomar decisiones en común acuerdo y en un espíritu de comunión.
🤗 Felicidades Ángela, buen comentario. Tenemos que lograr que todos juntos pasemos de la palabra a los hechos, como pueblo integrado y guiado por un mismo Espíritu camino al padre, en comunión, participación y misión 🇩🇴.
buenos días, quisiera expresar de la mejor manera algo que siento hace mucho y que la llamada al camino sinodal hizo que pudiera volcarlo poniendo voz y letra a algunas reflexiones. En primer lugar quisiera que nos ayudemos entre todos a re pensar el significado profundo de la Teología. En el punto Teologías y prácticas pastorales algunos continentes expusieron desde su práctica y experiencia descubriendo detrás de ellas su teología. Pongo un ejemplo concreto: los círculos bíblicos reflejan una teología basada en la práctica de Jesús y las primeras comunidades. Leyendo los textos de la Palabra en unión con la vida concreta estamos haciendo un intento de seguimiento de esa teología. Brasil tiene infinitas comunidades que se basan en la lectura de la Palabra (históricamente Carlos Mesters fue enviado a Brasil con el nombramiento de obispo y al comprobar la realidad y la necesidad de evangelizar desde la Palabra renunció a ser obispo y dedicó su vida junto a otras personas para hacer de ello un camino nuevo que hoy describimos como sinodal)
Con esto simplemente quiero decir que nuestra mentalidad no cambia cuando decimos Teología, seguimos creyendo que se enseña en círculos académicos y a seminaristas. Comprobamos concretamente que cuando un seminarista llega a formar parte de una comunidad antes de ordenarse trae consigo la porción conservadora y normativa recibida en el seminario y su poder de decisión muchas veces pasa a ser parte en el trayecto comunitario, al tiempo que muchas personas arraigadas y con vivencias de fe no tienen un espacio en donde manifestarse. Esto es también sostenido por el clericalismo, pero más grave aún es el co-clericalismo que practicamos los laicos.
La sinodalidad como “dinámica y forma de proceder” nos involucra a todos en la Iglesia, surge como esa noción de una Iglesia toda convertida en Pueblo de Dios y luego la expresión que más anima “caminando juntos” que se convierte en el espíritu de colaboración y complementariedad de toda su feligresía.
Después de seguir los videos de la semana, siguen resonando el mí las palabras Escuchar, dialogar, discernir, tomar decisiones, corresponsabilidad….y todo ello movidos por la acción del Espíritu que guía a la Iglesia como “Pueblo de Dios” que peregrina en este momento de nuestra historia.
Gracias por esta formación recibida
Tanto los temas tratados, como las experiencia y los comentarios que han hecho, animan la esperanza y el deseo de seguir adelante, empezando por lo pequeño que tenemos en nuestras manos y vida. Gracias a todos!!
No solo han sido o son representantes de la curia, mucha responsabilidad también es de los laicos que ocultamos nuestra condición de católicos y seguidores de Jesucristo en nuestra vida diaria, o más aún que nos decimos discípulos y actuamos como todo lo contrario. Miremos primero la viga de nuestro ojo, por favor.
Totalmente de acuerdo con la valoración de este curso de Boston College. Muchísimas gracias por ello.
Quiero resaltar que Iglesia SOMOS TODOS. Por ello aprendamos a ser humildes discípulos misioneros y cumplamos el mandato de todo bautizado: “id y predicad el Evangelio”, sobre todo con nuestro testimonio y también con nuestra voz.
Me llama la atención la eclesiología de familia de Dios, porque Jesús vivió a Dios como Padre/Madre y a los demás como hermanos… Me gustaría vivir una Iglesia donde todos nos sintamos hermanos, hijos de un mismo Padre, así transformar nuestras sociedades según el Reino de Dios.
En mí quedaron resonando conceptos y experiencias compartidas en esta semana que fueron muy enriquecedoras y significativas.
Alguno de los desafíos:
La sinodalidad que “habilita la participación de todas y todos de esa gran diversidad de dones, ministerios, servicios, carismas para poder hacer procesos en conjunto de discernimiento y de toma de decisiones que correspondan a la visión y a la misión pastoral de la iglesia…” nos invita a crecer personal y comunitariamente en la vivencia cotidiana del Evangelio… como proyecto de vida, siempre conscientes que somos caminantes, peregrinos, buscadores del Misterio, sabiéndonos frágiles, necesitados de conversión…
Es un gran desafío, en la comunidad, hacer vida el Sensus Fidei , a través de la escucha, el discernimiento, la consulta,… siendo muy respetuosos de las diversas culturas que enriquecen con su presencia la vida de la Iglesia siendo fieles a los signos de los tiempos actuales.
CONSOL BALDRÍS ARNEDO 19-02-2023
Muchas gracias por los vídeos de los ponentes que nos permiten reflexionar y comprender mejor, lo que es la sinodalidad en la Iglesia.
El Espíritu, sin que nos demos cuenta, va actuando en cada ser humano y nos ayuda a discernir en el diálogo con otras religiones y con la sociedad.
Comentario al foro de la semana 2, hoy 19/02/2023
Tengo que seguir profundizando el tema de la sinodalidad, porque cuanto contenido encierra este término que no solo indica caminar juntos de la mano con el espíritu santo, sino también que me llama a tener ese sentido de pertenencia dentro de la iglesia.
A ustedes Dios le continúe regalando el don de la sabiduría para que sigan instruyendo al pueblo de Dios. Bendiciones
Para mí las distintas intervenciones son profundamente enriquecedoras. Sobre todo, porque a pesar de su variedad geográfica reflejan anhelos comunes, caminos similares, las mismas dificultades y los mismos anhelos. Agradezco a los hermanos y hermanas de Alemania y Canadá su claridad meridiana al comentar los casos de abusos de todo tipo en el seno de la Iglesia, y hacernos así conscientes de la conversión que necesitamos; de la renovación estructural que se nos pide y a la que el Espíritu nos empuja, para que nuestra misión de evangelizadores, de ser sal de la tierra y luz del mundo tome el impulso decisivo que necesita nuestro mundo de hoy.
Muy buenas, la temática de esta segunda semana realmente excelente, me ha ayudado a expandir la tienda del pensamiento eclesiologico y comprender que por muy pequeños que sean los signos, hay un caminar juntos que ilumina y fortalece la fe y la esperanza.
Muchas gracias a quienes han dedicado tiempo y nos han regalado las diferentes exposiciones.
Siguen marcando el reto de una conversión personal al Señor y su Espíritu en nuestra historia para seguir siendo testigos y constructores del Reino como Pueblo de Dios.
Muchas gracias por tan valiosos aportes.
Para mí esta semana ha sido mucho más enriquecedora que las anteriores. Un reto enorme de vivir la sinodalidad en un contexto nicaragüense. Escuchar los procesos de los distintos continentes despierta en mí la esperanza al saber que se abren caminos. Gracias a todos por sus compartires.
Una semana muy enriquecedora, muy importante las experiencias de Asia, África, América Latina, Europa y América del Norte. Gracias a todos los que nos iluminan con sus testimonios en este caminar sinodal.
Escuchar, dialogar, discernir, tomar decisiones, corresponsabilidad, son conceptos que nunca debieron estar fuera o alejados de este caminar como Iglesia. Para mí, lo más novedoso de estas exposiciones, en esta semana, es que empieza a sonar con fuerza, no por uno sino por algún otro, el que la sinodalidad no solo es característica de los que forman parte de la Iglesia, los bautizados, sino de todo ser humano de buena voluntad. Esto abre la posibilidad de recordar que la misión de la Iglesia es proclamar el Evangelio a toda creatura de buena voluntad y ser servidora del mundo en cuanto a promover una espiritualidad comunitaria en donde el actuar cotidiano de cada uno, cada una y de todos, tenga como principio la alteridad, que es el descubrimiento de la concepción del mundo y de los intereses de un “otro”, y desde el Evangelio, el modelo del Sermón de la Montaña.
El clericalismo, que impide la misión de la Iglesia, ya es parte del pasado, debe resignarse a su retirada, y reinventarse. Dios que es Amor, espera este gesto generoso para que el Espíritu Santo actúe con fuerza y todos podamos experimentar, pasito a pasito, paso a paso, una sociedad cada vez más humana desde el querer de Dios, un mundo mejor.
Buena semana para todos y todas.
Maravillosas las exposiciones realizadas que me han permitido conocer los inicios de la Sinodalidad en la Iglesia Primitiva, el caminar del pueblo de Dios, cómo ha sido el proceso en los diferentes continentes, obstáculos y retos, la importancia de las Iglesias Locales y la presencia del Espíritu Santo derramando sus carismas sobre nosotros los laicos sin propio para darlo todo, con sentido de escucha y dialogo para lograr inclusión y llegar a ser protagonistas que nos permitan lograr cambios a través del llamado de Dios.
Gracias por los aportes y sentires de los participantes de este curso.
Buenos días! También agradezco, como los comentarios anteriores, la luz que aportó esta Semada de reflexión y profundización. Particularmente me resultó muy novedoso escuchar lo del Derecho Canónico, y los testimonios y aportes de cada Continente. Como se dijo antes, los aportes ayudan a visibilizar el camino que viene haciendo la Iglesia, la conducción del Espíritu… y constatar que aún falta bastante, que necesitamos Formación. Muchas gracias
Las experiencias presentadas esta segunda semana ensanchan nuestra tienda. Las diferentes culturas aportan raíces de sinodalidad. Mil gracias
Esta semana el tema presentado fue mucho mas interesante e intenso. Muy buenas exposiciones. Yo me preguntaba, cuando Pedro y los apóstoles predicaron en el principio el Kerigma, guiados por el Espiritu, no sabian en que iba a terminar todo. No tenian idea de que habria un Papa en Roma y 5 continentes con fieles cristianos. Es decir, hicieron todo movidos por el Espiritu y sin miedo; sin temor, sin preguntarse que pasará. Luego vinieron los concilios. Hoy me parece que es parte de la jerarquia la que tiene miedo a este cambio, tiene falta de confianza en el Espiritu y en su guia. Concuerdo que si no hay voluntad de cambio, no se cambia. Lo expuesto por los excelentes oradores amplía mi horizonte de entendimiento sobre la sinodalidad y un poco, nomás me permite mirar el futuro. Ojala que todos los fieles podamos comprender la responsabilidad que tenemos y hacer posible este cambio tan necesario para la Iglesia del tercer milenio.
Está segunda semana ha aportado profundamente en mi camino, hacia una sinodalidad que genere en mi vida una conversión personal, para que desde mi coherencia de vida, los demás desde el ver, actuar y juzgar , empiecen también este camino para lograr una iglesia en unidad desde la diversidad, ya que cada ser humano es unico… El último video me parece clave, discernimiento desde la escucha, o circulos de escucha para ver el terreno del otro y acogerlo con respeto y lograr la unidad en la diversidad. Es importante que obispos y sacerdotes, religiosos y misioneros seamos de verdad coherentes y no seamos personas llenas de poder, si no del evangelio que es Jesús mismo.
La sinodalidad como llamada del Pueblo de Dios en camino exige de todos los miembros participación y corresponsabilidad. Estamos empezando a hacer juntos este camino manteniendo la esperanza viva y sabiendo que es un proceso que no termina. Comenzó en la primera comunidad cristiana y continua hoy movidos por la acción del Espíritu Santo que no abandona la obra comenzada. Cada cristiano podemos aportar algo al crecimiento en comunión de todos los que formamos la iglesia de Jesús y consideramos hermanos a todos los hombres ya sean de distintas culturas y religiones.
Totalmente de acuerdo contigo. La sinodalidad no es otra cosa que comunión. Es el Espíritu es que nos mueve a todos a buscar esta común unidad siguiendo las enseñanzas de Jesús que nos llama incluso a ampliar nuestras fronteras hacia una fraternidad universal .
Muy útil para el proceso parroquial que estamos desarrollando, el Espíritu siempre puede más y va delante y este curso es una luz en manos del Espíritu. Gracias
Ciertamente, la sinodalidad involucra a todos, resaltando la identidad de pueblo de Dios. Desde esta mirada somos llamados a reconocernos pueblo de Dios que camina en una dinámica de escucha, diálogo y discernimiento común.
Ciertamente, la sinodalidad involucra a todos, resaltando la identidad de pueblo de Dios. Desde esta mirada somos llamados a reconocernos pueblo de Dios que camina en una dinámica de escucha, diálogo y discernimiento común.
La sinodalidad no es una moda, cómo muy bien lo dice el Papa Francisco, es la que marca el sentido, estilo de vivir como iglesia, por eso la necesidad de formarnos todos y todas en sinodalidad.
En esta segunda semana me ha llamado la atención el papel tan importante que va haciendo la mujer en la iglesia y concretamente en este proceso sinodal, igualmente el laico debe reconocer su corresponsabilidad en ésta dinámica y el llamado es a a participar desde sus dones y talentos.
Las diferentes ponencias me han ayudado a revitalizar la fe y la esperanza de sabernos en camino tras las huellas del Señor Jesús.
Muchas gracias a quienes han puesto su corazón y creatividad en este proyecto que semana tras semana nos ilumina y anima
Gracias?
Ese es peligro, convertir la Sinodalidad en un proceso intelectual y no experiencial.
Gracias por alargar la mirada a diferentes realidades eclesiales. Definitivamente este proceso sinodal cada día está tomando más fuerza. Es cierto que las voces en contra son más sonorosas. Pero en el silencio de Dios, como la suave brisa de la mañana, construimos sinodalidad.
Todos los comentarios nos eenriquecen mucho. Como tú me ha impactado mucvho el énfasiss en la acción del Espíritu Santo. Esto no es nuevo pero renueva nuestra mente y nuestro corazón. Que el Espíritu sea verdaderamente la guía en cuantos discernimientos eclesiales y com,unitarios tenemos que hacer en esta hora de la Iglesia.
Gracias por tu comentario
Así es, sobre todo las experiencias de otros pueblos han sido muy enriquecedoras, vemos que ya se ha avanzado, aunque sea lentamente, pero vamos en camino, y ya eso es algo bueno.
En este camino sinodal, me lleva a comprender más aun mi realidad como laica y servidora en mi parroquia, ver más allá, como Jesús quiere que viva su iglesia, que sea un iglesia que escucha pero que toma acción y esa acción es abrir las puertas a la dignidad humana. Por eso este camino sinodal me llama a contribuir con los dones y carismas que el Espíritu Santo me ha regalado.
Me queda claro que en este camino a la sinodalidad, el acento no ha de estar puesto en la diferencia, sino en el elemento común: Jesús y su experiencia de amor. Creo que la tentación más grave es ubicar el punto en común la diferencia.
La sinodalidad se juega en nuestros propios círculos, chicos como grandes. Gracias.
A lo largo de los temas escuchados, en donde mayormente se enfatiza en la escucha, el diálogo, el trabajo en equipo. Me hace entrever que no es el llamado del Papa como tal, en realidad es el querer de Dios. Es la forma de cómo podemos hacer realidad su sueño de que sus hijos todos juntos formemos una sola Iglesia que se preocupe por ser testimonial y generosa en su servicio
Así es Miqueya.Estoy de acuerdo contigo. Entiendo que las temáticas abordadas en las distintas intervenciones nos orientan acerca de las implicaciones que supone una Iglesia Sinodal y de los desafíos que se deben enfrentar para lograr su total desarrollo y eficacia.
Las experiencias presentadas por los expositores representantes de cada continente nos muestran y resaltan algunos aportes o aspectos claves que nos pueden ayudar a ir construyendo esta Iglesia Sinodal que demanda nuestro mundo en la actualidad.
Pienso que nos toca a todos y cada uno de nosotros ( Pueblo de Dios) desde el rol que desempeñamos en nuestras parroquias, ,diócesis u otros espacios, seguir caminando juntos hacia la adopción de compromisos de participación activa y crítica, que permita la escucha mútua,el análisis de las diferentes realidades y necesidades. Hacernos conscientes de lo importante y valioso que puede ser cada aporte y punto de vista de todos los que conformamos la iglesia, para la toma de decisiones ante las situaciones de injusticia, desigualdad social ,la violencia, el maltrato al ser humano y a la naturaleza, los abusos,la discriminación social, la exclusión entre otros.
Muchísimas gracias a la institución Boston College y a todos los expositores por compartir con nosotros estos temas de relevante importancia.
Felicidades Carolina, creo que estamos comprendiendo que el camino de Sinodalidad lo construimos todos, desde nuestra realidad y en nuestro entorno
Me gusta lo que dices que la sinodalidad nos llama a dialogar con todas las religiones y con la sociedad; esta es la vía de un verdadero ecumenismo.
Totalmente de acuerdo contigo!
Todos los temas me parecieron interesantísimos y de gran ayuda para vislumbrar el camino que debemos recorrer. Ciertamente no será fácil, hay que cambiar la mentalidad y aprender a escuchar.
Particularmente me pareció muy doloroso escuchar la historia de los pueblos indígenas de Canadá.
El tema referente a la sinodalidad y el derecho canónico me pareció muy interesante, ya que vivir la sinodalidad también debe verse reflejado en las estructuras, en la organización. El derecho canónico es un instrumento indispensable, que pone de relieve lo que la Iglesia vive, no esta alejado de lo que ya se ha discernido y consensado en la base.
También los testimonios me parecen muy iluminadores, en cuanto que las prácticas sinodales, dan pie a nuevas formas de pensar y reflexionar nuestra fe, encarnada en una realidad con múltiples problemas y desafíos; como de situaciones vergonzosas y contrarias a lo profesamos se puede aprender y buscar volver a Dios. Además de conocer la riqueza de formas, según las características de cada continente. En América Latina las comunidades eclesiales de base viven la sinodalidad desde hace décadas y han sido mal vistas y perseguidas por hacer suya esta forma de ser iglesia – pueblo de Dios, donde todos somos iguales, hoy en día muchos obispos las relegan, minimizan y buscan acabarlas, porque generan cambios y desactiva privilegios, favorecen la madurez en la fe.
Así es Julio Alberto, la palabra “Sinodalidad” encierra el significado más amplio que podemos imaginar, pero creo que lo importante es comprender que el término ” Sinodalidad” nos involucra en una participación general, a todos; ya que con ella le daremos una nueva imágen a la Iglesia de Cristo, que es la nuestra.
La sinodalidad y el derecho canónico van de la mano, como de la mano debemos de caminar todos los que participamos en este proyecto de servicio al Señor; pues los caminos pueden ser diferentes, pero la meta será la misma para todos; “crear una Iglesia sinodal al servicio de todos los cristianos”.
Carlos Ernesto, yo creo que la sinodalidad debe ser un proceso tanto intelectual como experiencial, pues lo que se piensa con el cerebro viene del corazón, pero importantísimo es aplicar nuestra experiencia que realicemos en cada acción en favor de la sinodalidad.
Carlos Ernesto, yo creo que la sinodalidad debe ser un proceso tanto intelectual como experiencial, pues lo que se piensa con el cerebro viene del corazón, pero importantísimo es aplicar nuestra experiencia que realicemos en cada acción en favor de la sinodalidad.
Gracias por la sinceridad y claridad de muchos ponentes, que ponen el dedo en la llaga. Especialmente de Europa y Norteamérica. No veo claro que el auge de la sinodalidad venga por el tema de abusos sexuales, pero sí es verdad que lo ha desencadenado aquí, en Europa, por la indignación de los católicos y por el daño que nos ha hecho a la Iglesia toda. El tema es cómo superar el clericalismo y el abuso de poder, sin duda…. soy presbítero en España y sé lo cerrados que son algunos ámbitos eclesiales. Muchas veces lo que se hace es “dejar pasar la tormenta” y ni se afronta el problema ni se cambia nada… y así crece la desesperanza…. Animo a todos/as en este camino sinodal irreversible.
Muchas gracias por este curso, yo lo necesitaba. Me esta ayudando a captar la profundidad de esta reforma que busca la Iglesia, me esta llevando a contemplar mejor las diversas iglesias en sus necesidades y a la situación concreta de hoy.
Siento como el Espíritu nos esta moviendo en esta dirección, al Papa Francisco liderando este movimiento y Obispos y fieles avanzando. ¡Ojala este movimiento se amplié y cada iglesia según su historia pueda vivir las actitudes y acciones que se precisen. Siento el movimiento de una Iglesia que reinicia, me ha dado esperanza, compromiso para aunar mis fuerzas y contribuir a que la Iglesia de Jesús sea sal de la tierra.
No dejan de ser interesantes todas las ponencias . Después cada persona irá quedándose con lo que más le llame la atención y sobre todo le sea útil para en-
tender el tema principal que es el cómo caminar juntos (sinodalidad) sobre todo partiendo de lo fundamental : La Iglesia local.
Gracias, Pascual..
Christian Bauer señala que una de las razones del origen del actual sínodo sobre la sinodalidad son los casos de pederastia en la Iglesia, esta sería una razón controversial, no solo por su importancia, sino por el legado de personas vulneradas, y que su visibilidad y análisis debería de permitir erradicar este tipo de malas prácticas.
Otro punto es el cómo se dio la evangelización en algunos territorios (p. eje.: Canadá, América Latina) que daño herencias culturales de los pueblos originarios y a sus poblaciones, imponiendo una religión, que si bien consideramos superior y que los benéficos superaron las perdidas, no era la propia. Por supuesto que actualmente se tiene el concepto de la inculturación, pero no podemos evitar pensar que la difusión de la palabra de Dios, invariablemente va acompañado de cierta pérdida de identidad cultural.
Buenas Nuevas. Muy agradecida por todos los aportes sobre la sinodalidad. Queremos, deseamos y le pedimos al Espíritu Santo que suscite un proceso de conversión personal, comunitario, eclesial para creernos de una vez por todas que debemos caminar juntos. Todos tenemos que mirar a nuestro alrededor y contemplar la presencia de Dios que nos invita a continuar en ese proceso de diálogo sincero, de encuentro sencillo y cercanía cálida entre nosotros para poder abrir caminos de esperanza, de vida, de comunión. Nuestro horizonte está en esa mirada esperanzadora que nos lleva cada día a encontrarnos y a aportar por un vida digna, una Iglesia que escucha los clamores y se deja interpelar; se implica y se complica porque nuestros hermanos que sufren y el grito de nuestro planeta tengan una vida armónica y feliz. Estamos en camino, confiamos en Dios Madre y Padre que nos acompaña y fortalece en todo momento….arriesguemos!
Me ayudan mucho vuestras aportaciones y conozco mejor el sentido de sinodalidad en la Iglesia. Pienso que no debemos olvidar que ser sinodal requiere dedicar tiempo para compartir. Hablar con valentía y verdad. Así vamos creciendo en comprensión, dialogando se aprende., Podemos cambiar nuestra opinión después de escuchar con humildad.
Como decía Carlos tenemos que estar abiertos a la conversión , al cambio y discernir lo que me dice eL Espíritu en la escucha. Olvidarnos de “siempre se ha hecho así”.
Reitero mi agradecimiento a todos y todas.
Verdaderamente los temas tratados en esta segunda semana han sido muy valiosos para comprender en una forma más amplia el camino de la sinodalidad. Los círculos de Escucha creados en Canadá, por ejemplo, nos dan un espacio muy positivo en aspectos tan importantes como son la Sanación y la Reconciliación.
En el caso de Asia, el llamado al diálogo, en un contexto de pluralidad de culturas y religiones, debe cubrir tanto los aspectos interreligiosos como interculturales.
En América Larina, en el sínodo de la Amazonía, se abrió un camino muy importante para entender nuestra necesidad de proteger nuestras culturas precolombinas tanto en sus aspectos socio.religiosos, como también en el cuidado ambiental contribuyendo a la protección de la casa común en que vivimos.
Muy impactante me pareció la contribución dada en el caso de Europa en los temas relacionados con el abuso sexual, lo cual nos lleva a una autoevangelización: debemos examinar nuestra propia interioridad antes de llevar la evangelización a nuestros ambientes.
El llamado de Africa es fundamental en el cuidado de las condiciones humanas, en comunidades que vivan en solidaridad y en el respeto mutuo, sobre la base de nuestro ancestro común.
Hermin muy deacuerdo a tu compartir sisi
“Uno a la escucha de otros y todos a la escucha del Espíritu”, una gran riqueza vamos viviendo en este tiempo eclesial , pasos lentos en algunos lugares resistencias en otros lo que si vemos claro que debemos dar un giro.
Volver a la Iglesia servidora, Evangelizadora, a la Escucha del Pueblo de Dios sus diferentes realidades, a la escucha de Dios , de mirada amplia y un corazón sin fronteras que no excluya sino mas bien llamada a integrar
Vamos siendo protagonistas de esta Historia Sinodal y nos queda un gran aporte por dar. Bendiciones
Algo que noté en la presentación de América Latina. Me pareció que no se mencionó en ningún momento el Sinodo de Aparecida realizado en Brasil.
Aparecida tuvo una gran contribución en dar a su Santidad el Papa un gran apoyo para llevar el mensaje de Jesucristo a todos los hogares.
Su mensaje central : “Somos discípulos y misioneros de Jesucristo para que nuestros pueblos en El, tengan vida.” ” Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida” (Jn 16,4)
Buenas. Efectivamente, la sinodalidad nos invita a caminar juntos como iglesia y brindando la mano amiga al necesitado. Una iglesia sinodal nos permite tener mejores seres humanos porque el solor de uno es del otro también. Estoy emocionada de seguir adquiriendo tantos conocimientos de como es uns iglesia sinodal.
Dios permita que podamos entender todos los temas tratados por ésta vía de nuestros grandiossos exponentes.
Bemdiciones
Dorisbel Pérez
Santo Domingo🙏🙏🙏
Las diversas aportaciones de los conferencistas nos ayudan a comprender mejor lo que estamos viviendo en la Iglesia. Destaco de las experiencias, presentadas la importancia de la comunicación, el diálogo, el fortalecimiento de las relaciones , el abrir espacios para compartir y hablar con verdad, sin temor.
En mi iglesia local, ese pueblo de Dios en un lugar concreto, hace falta aún mucho trabajo. Es difícil a comunicación, las decisiones continuan siendo tomadas de manera vertical, sin participación. Escucho mucho la palabra sinodalidad, caminar juntos, pero en la práctica se continua con las viejas costumbres. Lo peor, es que el seminario sigue formando de la misma manera, lo que hace preveer que esos futuros sacerdotes tendrán las actitudes que se deben desterrar.
De igual forma el consejo diocesano es visto por los mismos sacerdotes como una “rosca” a la que no ingresan todos. Y en los consejos pastorales, por falta de formación de los laicos, se continua haciendo lo que el sacerdote dice.
Esperemos que la fuerza y la luz del Espíritu, cambie esta situación.
La Sinodalidad la vivimos en cada Parroquia, desde diferentes partes del mundo, Dios nos recalca que nos quiere unidos a todos, caminando de su mano. Él no hace distinción de razas, lenguas, naciones o religiones, nos ama a todos por igual y quiere que todos caminemos juntos como verdaderos hermanos. Invoquemos siempre al Espíritu Santo, tal como lo escuchamos en una de exposiciones, el Espíritu Santo facilita el diálogo entre Dios y la Iglesia. Gracias, Dios los bendiga.
Conversión, para poder llevar a cabo la voluntad de Dios por medio de este sínodo
Es muy interesante este proceso de pasar desde el enseñar al aprender, ¡Cuánto tenemos que aprender de las realidades concretas y de una nueva forma de hacer Iglesia!! Sin dejar de enseñar, hay que acentuar mucho el aprender para equilibrar nuestro ser y hacer comunidad sinodal.
Agradezco todos los aportes llenos de riqueza y que permiten contemplar aspectos o coincidir con los temas expuestos por los expositores y los hermanos y hermanas del curso.
Algunas de las resonancias que han quedado:
. Cada vez la Sinodalidad avanza y vemos que la Inclusión, Obispos, Sacerdotes, Laicos de otros credos van caminando juntos en todas parte del mundo.
. El Circulo de Escucha, podriamos apropiarnos durante el proceso de vida familiar, personal….muy triste el despojo de los indígenas, me recordó similar situación en Australia.
. La dignidad bautismal y cómo por el bautismo compartimos esa dignidad y adquirimos compromisos.
. El Sensus Fidei, a través de la voz del Espiritu Santo, sus diferentes carismas y continuar la inspiración en EL.
Paz y Bien
Lo que más me entusiasma de la sinodalidad es la escucha, siempre escuchando a los otros a todos, algo que suena muy bien y que suele ser tan difícil. Caminar con y escuchando que maravilla. Escuchar y que el Espíritu nos ilumine y abra del todo.
De acuerdo contigo Hermín, somos corresponsables y protagonistas de una Iglesia que escucha, sana , discierne en comunidad
Gracias por la síntesis que nos regalas de los temas de esta segunda semana
Los temas de esta segunda semana, las experiencias y testimonios de cada continente, hablan del Espíritu de Dios que mueve hacia la Sinodalidad. El Sensus Fidei que nos otorga la posibilidad de comprender que todos y todas tenemos una palabra que aporta, que construye.
En un mundo tan diverso, multicultural , me conmueven los círculos de escucha en Canadá, una historia de mucho sufrimiento y que se va restaurando a través del perdón, de la escucha. El testimonio desde el reconocimiento de una cruda y dolorosa verdad en Europa, Asía con un abanico de una gran diversidad de religiones , modelos de gobierno, idiomas . Centro y Sudamerica con realidades que rescatan la escucha de la religiosidad de los pueblos. Africa que nos aporta ser familia desde el modelo trinitario.
Gracias a cada uno y cada una de los ponentes por su palabra sincera, honesta, con conocimiento y llena del Espíritu.
Es interesante el volver la mirada hacia atrás y reconocer que la sinodalidad es de siempre, pero ahora se hace urgente abrir estos espacios para compartir y hablar abiertamente sin temor a donde ha llegado el clericalismo y todo por no estar atentos a la voz del espíritu que nos invita a escucharnos a poner en práctica la humildad para respetar las opiniones y posturas de los demás es un arduo trabajo por mas que hablemos de sinodalidad si no hay una conversión no se podrá hacer nada. Interesante como los diversos exponente hacen su presentación me ayudan.
Estoy de acuerdo contigo.
Aprovechemos este tiempo de Cuaresma que empieza hoy para CONVERTIRNOS, volver a Jesús y viviendo de sus enseñanzas encarnar en nuestra vida diaria el mensaje evangélico y llevarlo a nuestros hermanos viviendo en cada instante en el AMOR.
Magnifica segunda semana del curso. Los términos se van aclarando y vamos profundizando en el hecho de la Sinodalidad. Muy buena la exposición del “Sensus Fidei” como instrumento del Espíritu Santo para guiar a la Iglesia. Interesante los diversos puntos de la vía canónica en cuanto a nuestra Sinodalidad.
Llega muy oportunamente el mensaje de Cuaresma del Papa Francisco con esa alegoría entre la Transfiguración y la Sinodalidad. Todos debemos leerlo!
El conocimiento de la verdad nos hará libres.
Es importante el aporte de cada uno de nosotros para poder ser una iglesia sinodal: hombres, mujeres, pobres, ricos, sabios e ignorantes. Todos tenemos el mismo derecho a ser escuchados. Que este nuevo camino sinodal nos lleve a descubrir la iglesia que Dios quiere.
Me queda claro que este camino nos llevará a redescubrir una nueva iglesia. La que Dios quiere, la del nuevo milenio. Que sea un camino donde cada uno se sienta participe, acogido, escuchado, involucrado. Esta es mi aportación.
Me queda claro que este camino nos llevará a redescubrir una nueva iglesia. La que Dios quiere, la del nuevo milenio. Que sea un camino donde cada uno se sienta participe, acogido, escuchado, involucrado. Esta es mi aportación.
Así es, muy bien 👌
Aaaamén
Las diferentes ponencias y las experiencias de los iglesias termine por animarnos, llenar de esperanza y fortaleza para seguir construyendo la Iglesia. Con humildad asumir nuestros limites. La confianza en el Espiritu que nos permita caminar como un Publo Peregrino, donde la escucha, la acogida y solidaridad compartida sea signo del Reino.
Como bien señala aquí Luis Eduardo pero también lo han hecho otras y otros tantos en esta compartida, me ha resultado muy iluminador el aporte sobre el “sensus fidei fidelium”, como una constante y renovada acción de Espíritu en la iglesia, de todos los tiempos, pero con fuertes expresiones en nuestro hoy. Poder tener una mayor conciencia creyente de que estamos inmersos en la corriente vital de Espíritu que se expresa en la hermosa diversidad (lo que se compartió de Asia en sus colores históricos, interculturales e interreligiosos, x ej….). Quizá, como se ha expresado, es el tiempo de caminar como una comunidad de creyentes más pneumatológica, sin menoscabar el sentido de Cristo-Cabeza sino dejándonos invitar, como Cuerpo, por el Espíritu que danza la multiforme armonía de este tiempo sinodal. Gracias por ayudarnos a profundizar en esto! Ven Espíritu que caminas y bailas en nuestras vidas!!
Muy buen contenido y ponentes. Me parece que el contenido del tema “La contribución de las mujeres para una Iglesia Sinodal”, si bien presenta contenido interesante y qué hay que atender, no responde exactamente al título o podría ser explotado en mayor profundidad. No estoy diciendo que no aporte, sino que esperaba algo distinto. Por otro lado, el,curso me permite ver la,importancia de la Sinodalidad y creo que Francisco es Francisco no tanto por la preocupación por los pobres (que lo es) sino más bien por La Reforma Eclesial que lidera a través de la Sinodalidad (como “El Poverello de Asíssi”
Muy de acuerdo con el comentario de Hermin..la sinodalidad de Nuestra Iglesia es caminar juntos en la diversidad…pero la escucha y ponerse en la situacion del hermano y dejar que el Espiritu fluya…y que sea un gran consolador y motivador de los hermanos
Muy de acuerdo con el comentario de Hermin..la sinodalidad de Nuestra Iglesia es caminar juntos en la diversidad…pero la escucha y ponerse en la situacion del hermano y dejar que el Espiritu fluya…y que sea un gran consolador y motivador de los hermanos
La escucha..de la palabra.. el discernimiento y la toma de desiciones mi amigo Raicoro. Nos crea una identidad de Hijos de Dios…no nos olvidemos que la fuente principal son los evangelios…y los mandamientos..
No debemos de perder el magisterio de la moral…que ilumina nuestros actos..
Muy de acuerdo a Doctorolano la sinodalidad es universal…abarca como dice los 5 continentes… Nuestra Fe es universal
Muy de acuerdo a Doctorolano la sinodalidad es universal…abarca como dice los 5 continentes… Nuestra Fe es universal
Excelente curso de historia desde los primeros siglos se construye la historia de Salvacion…historia de sanacion todo se va transformando y hay que situarse en los signos de los tiempos…
La estructura y el cambio de una Iglesia con un modelo de hace mas de2000 años
Con abusos de poder… tiene una carateristicas de un clericalismo aberrante..el cambio de gobernabilidad tomara su tiempo
Muy de acuerdo a Doctorolano la sinodalidad es universal…abarca como dice los 5 continentes… Nuestra Fe es universal
Angela..que nuestras autoridades abran sus corazones para todos aquellos marginados..violentados…abusados… miremos con misericordia…y compasion…integremos como verdaderos hermanos…hagamos de nuestra Iglesia …una Iglesia de salida…busquemos por las periferias….hagamos la multiplicacion de los panes y pescados…el milagro de Dios…actuara..
Creo que es esencial para la sinodalidad el no centrarse en la Iglesia comunión tal como se hizo en 1985 con el Papa Juan Pablo II y centrarse más en el Pueblo de Dios, es el punto de partida de la sinodalidad. La Pueblo de Dios es el marco donde tiene que promoverse y ejercitarse el “sensus fidei”, es decir buscar en todo el consenso, que no es tanto el acuerdo mental, como el sentir común, este es el acento que tenemos que poner de relieve. Podemos discrepar en las percepciones, visiones, ideas, eso es hasta positivo, donde tengo que poner el acento es en la con-cor-dia., esa es la clave a la hora de buscar el consenco.
El recorrido por las experiencias de sinodalidaad en los diferentes continentes me han ayudado a comprender que el Espíritu Santo no ha estado de vacaciones y que, si bien no es una actitud generalizada, personas y comunidades han sentido el llamado a escuchar la voz del Espíritu Santo que se manifiesta en las personas. De esta manera, escuchando a las personas, ha sido posible promover nuevas iniciativas de inculturación, de respuesta a situaciones problemáticas, de iniciativas organizativas en las que se manifiesta una sensibilidad por la participación más amplia de los miembros del Pueblo de Dios.
Un afectuoso saludo para todas y todos quienes conforman esta Comunidad Fraterna y Virtual. Adentrándonos cada vez más en la experiencia de una mejor comprensión de la historia de la Iglesia en relación con este tópico de la Sinodalidad, nos vamos dando cuenta que tenemos procesos que han estado marcados por reuniones, concilios, sínodos o de alguna manera, estructuras que han permitido hasta cierto punto un caminar, pero que no han permitido en su totolidad las transformaciones pastorales y estructurales con apertura a la mayoría de los miembros de la Iglesia, Me parece que darnos cuenta de la realidad global de una Iglesia sinodal, nos permite avanzar con mayor decisión categórica sin rigorismos eclesiológicos anclados desde antes del Vaticano II. Tenemos que seguir avanzando en este modelo eclesiológico desde las aportaciones de LG como documento preponderante del Vaticano II. Lo importante, no solamente quedarnos en la teoría, sino más bien, avanzar en la praxis pastoral, para lo cual, una verdadera conversión pastoral es lo prioritario. Con aprecio!
Si coincido, la temática y la estructura de la presentación no solo revelan consistencia y profundidad, sino a mi modo de ver, me ayudan a sistematizar y adquirir cierto método que permite una mirada amplia y universal sobre este redescubrir el clima propio de la convivencia y ciudadanía eclesial: la sinodalidad. Las experiencias compartidas y los acentos descubiertos insinuan el ancho horizonte en el que poco bastará la voluntad individual y los sueños personales de nuevas formas para los nuevos tiempos en las raíces de la misma Iglesia, si no es asumido el método y el lenguaje como casa de la existencia eclesial para el siglo XXI. Gracias a todos
– Hola, aquí Froilan de nuevo, de Rep. Dominicana. «Animador de Comunidad», en la Iglesia de mi país.
– En el foro del primer módulo encontré la siguiente frase, escrita por Beatriz: «…la sinodalidad… haciéndonos, dar importancia a lo importante y sobre todo, saber que hay muchos cristianos empeñados en crecer para ser fieles».
De aquí se desprenden dos criterios muy significativos.
1°- Darle importancia a lo verdaderamente importante. Sentarnos juntos a discernir y establecer prioridades en igualdad de derechos y corresponsabilidad como por el mismo bautismo. “Lo que nos afecta a todos, debe ser pensado y decidido entre todos”. No seguir viviendo una Iglesia sólo de eventos, mitos, populismos, sumisión y servilismo, y de decisiones indivualistas (piramidales), en vez de una Iglesia de procesos continuos, dosilidad al Espíritu, discernimiento y decisiones conjuntas, humildad, y obediencia con consciencia. Creo que en gran parte es lo que debe aprender y aplicar la presente generación. Para así poner en marcha la verdadera Iglesia que quiere el Señor para el tercer milenio.
– Estos estudios sobre la sinodalidad están abriendo nuevos horizontes mentales para comprender, vivir y tener la visión más clara de una Iglesia en comunión, inclusiva, corresponsable y participativa.
2°- Saber que hay muchos cristianos empeñados en crecer para ser fieles. Educación y desarrollo integral y Sinodal, y oportunidades a todos los niveles de la Iglesia, para crecer, servir y ser más fieles a Cristo, es una necesidad urgente hoy, es un desafío que nunca se debió descuidar, pero sobre todo en la presente generación. Una verdadera formación para el aprendizaje y el cambio necesario, y la búsqueda de resultados de inmediato con el suficiente seguimiento. Sólo así se hace realidad, porque una fe bien formada en obediencia a Cristo y en libertad y consciencia, sin temor. Nos ayuda a crecer más y mejor. Porque, en caso contrario, vivimos una Iglesia, cuya tendencia, es ser más fiel a la jeralquia, que al mismo Dios.
– Como dijo el mismo Jesús: “Yo vine a traer fuego a la tierra, y ¡¡Como quisiera que ya todo estuviera ardiendo!! La Sinodalidad debe ser entendida y aplicada semejante a un inmenso fuego en las selvas del mundo, o, como el Covid-19, qué a su paso, a todos nos hace iguales, y de igual manera, todos tenemos que aprender nuevas formas y aplicarlas de inmediato para sobrevivir y superar la situación. Así pues, debe ser, nuestra humilde comprensión, para entrar a la «Iglesia Sinodal» del tercer milenio.
!!!Felicidades y que Dios te bendiga, amén†. 🇩🇴.
Cada uno de los temas presentados abren cada vez más el panorama de la iglesia que Dios espera, una iglesia sinodal, que camina junto a su pueblo y su clero, pero también junto a él. En la sinodalidad encontramos el sentir de una iglesia viva, que deja de estar adormecida y mira su labor con amor, mira una cruz con amor y con gozo, porque sabe que le espera la resurrección.
Es un largo peregrinar, con sentido, con compañia, con objetivo y con esperanza.
La sinodalidad como un modo de ser Iglesia, del que todas las personas católicas somos corresponsables. Un modo de acabar con el clericalismo (o el modo de acabar con el clericalismo)
Interesantes las experiencias de los diferentes continentes. La pluralidad de Asia y su aportación especial en este tiempo, con diferentes tipos de culturas, religiones, ideologías.
La escucha generada en Canadá a raíz de lo vivido, que se convierte en lugar sagrado abierto a la sanación.
El sínodo de la Amazonía, en América Latina, que aporta, además el aspecto del cuidado de la casa común.
La visión de Europa, también marcada por los abusos, que busca un seguimiento sincero, pegado al Evangelio, pese a que ello suponga abrir los ojos al dolor.
Las comunidades de cuidado en África, de cuidado entre personas y cuidado del medio ambiente.
.+
Estoy de acuerdo con tus comentarios, realmente es inaceptable lo que a ocurrido con los abusos que la iglesia cometió y no me refiero solamente a los abusos sexuales que fueron ocultos, hoy la iglesia escucha y espero que no solamente escuche.
Contemplo a la iglesia europea, norteamericana de manera particular, pidiendo perdón por las atrocidades cometidas, pero comprometiéndose en un caminar para superar clericalismo y ejercicio de superioridad (no cabe ésta, en el evangelio) y volteo a la iglesia latinoamericana, en especial a la iglesia mexicana, y veo, con tristeza, que el camino va a ser mucho más arduo, que la cerrazón, y el “endiosamiento” de una estructura clerical, son tan fuertes, que parecería ser la fe misma.
Pero mantengo la esperanza, aún con el martirio, con verdugos incluso laicos y eclesiásticos “católicos!
Muchas gracias por todos los aportes tanto teológicos como pastorales. Particularmente las experiencias concretas me hacen sentir que el camino sinodal se va realizando de muchas formas diversas, no es una camisa de fuerza, y enriquecen enormemente. Me impresiona el hecho que experiencias de diálogo con víctimas de abusos sexuales, racismo y otras han servido para este camino sinodal, de hecho dan una mayor fuerza desde la humildad al tomar enserio el sufrimiento de las personas, el grito que llega hasta el Dios de la Vida, lo mira con compasión y nos pone en misión.
Si acaso una sugerencia a los administradores del curso: cuidar las traducciones! Se me ha hecho difícil seguir algunas de ellas. Otras excelentes.
De nuevo gracias!. Me encanta el curso!
Pedro A. Miguel
Hola
Ciertamente los temas y experiencias aquí mostrados son muy importantes, sin embargo en mi diócesis veo muy lejana esa posibilidad de llegar verdaderamente a una Iglesia Sinodal
Muy enriquecedor lo compartido y estudiado en esta semana. La espiritualidad sinodal se aplica dentro y fuera de la Iglesia y tiene un gran potencial. Las experiencias escuchadas dan animo y esperanza. Aquí donde vivo estamos promoviendo una forma mas participativa de tomar decisiones en la comunidad cristiana y en la forma de celebrar La palabra.
Quiero reasaltar el video sobre las implicancias en el Derecho Canónico. Me pareció muy interesante saber que el código del 83, al recoger la eclesiomogía del V II, abre la posibilidad de estructuras sinodales y la participación más activa de los laicos. También adhiero a la idea de que lo reflexionado en este sínodo deberá verse reflejado en una próxima renovación del Código. Muchas gracias!
Muy buenas tardes bendeciones:
La verdad que los temas que se han tratado en esta segunda semana han sido muy fructiferos para mi conocimiento y fotalecimiento espiritual acererca de la sinadalidad de la iglesia en general, ya que el recorrido es bien largo para comprender con claridad todos los aspectos esclesiales, y este proceso deveria de darce de caracter obligatorio en todas las diocesis, fundamentada en el camino sinoidal.
Las conferencias de la segunda semana me han fascinado y han despertado en mí el reconocimiento de la importancia de lo que está sucediendo este momento en la Iglesia con el Sínodo.
Me ha vislumbrado la premisa de reconocer el fenómeno del Sínodo como eclesial y teológico desde las experiencias de cada continente: el Sínodo es complejo, conflictivo y responde a esta época… Abrir espacios de escucha, comunión y participación en cada porción nos hará más Iglesia
Saludos
Bendecida tarde para todos, gracias por este curso de sinodalidad y espero pueda llegar a muchos más para aprender y poder participar en nuestras parroquias todos como miembros de la Iglesia en camino.
La participación de todas las personas bautizadas en la comunidad construye una Iglesia en camino sinodal. Una Iglesia que no se aleja de la vida del pueblo, donde más sufre.
Juntos podemos hacer grandes transformaciones que repercutan en la sociedad de forma tal que se pueda ver un antes y un después del sínodo de la sinodalidad! 🇩🇴
Buenas. Así es. Grandiosos yvaliosos temas acerca de la sinodalidad que nos invita a caminar juntos y aprender el uno del otro en el camino. Nos invita afrontar la realidad con valentía y sabiduría pero con alegría y esperanza.🙏🙏🙏
Buenas. Dorisbel de Santo Domingo RD Debemos orar mucho para que realmente se transforme la iglesia en lo que Dios realmente quiere que es la unión de todos, propagar el Santo Evangelio , visitar los enfermos y ayudar a los necesitados🙏🙏🙏🙏
Como podemos ver en algunos paísew como Africa y otros, la Iglesia es un hogar familiar de acuero a lo expresado por su facilitadora. Que todos se sientan acogidos. Que cada miembro haga su contribución. Que nuestra sangre común es el amor de Dios que ha sido derramado por medio de su Espíritu Santo. Construir un clima armonioso y excelentes relaciones humanas. Que cada miembro colabore y haga su contribución. Dios nos llama a vivir esa fe en familia llamada Iglesia. Bendiciones a todos
Hola mgleon, esto que dices que se ha avanzado es real pero es gracias a la comprensión que nos brinda el curso y a lo que vamos recibiendo no solo nos ayuda en vislumbrar por donde hay que caminar sino también nos ilumina el pasado donde muchas veces hicimos este camino intentando ese cambio que el Espíritu nos mostraba. Ahora con este nuevo presente entendemos una lucha que parecía morir en el intento. Me refiero sobre todo a la experiencia de la lectura bíblica en comunidad que todavía es un camino silencioso. Gracias a todos por tanta experiencia y tanta esperanza en el cambio.
Hola Beatriz, coincido con la novedad sobre el Derecho Canónico…es bueno enterarse. Sería mejor todavía i pudiésemos compartirlo como buena noticia expresada en concreto desde algunos cambios posibles. Creo que cuando se ponen los temas sobre la mesa y se encuentran signos que los refuercen es cuando vemos que algo nuevo está naciendo.
Estoy de acuerdo con el impacto que me provocó el testimonio de los abusos en Irlanda, sobre todo el cambio profundo que experimentó el enviado de Roma. Estuve en Irlanda hace cinco meses y conocí de cerca el dolor de varios Hermanos Cristianos con respecto a los abusos sufridos en los niños. De la misma manera que ellos se duelen por algo que sucedió dentro de su espacio congregacional nosotros también debemos dolernos por permitir los abusos de poder que permitiendo el sistema hacen posible llegar a los límites del mal
Sí dromero2219, tenemos que cuidar que la palabra sinodalidad este ligada a la práctica ya que es un camino de hacer al mismo tiempo que abrazar la espiritualidad que brota. Es algo similar al concepto hebreo de palabra que contiene en si: decir y hacer
Hola Carlos, yo creo que sí existe el caminar juntos en muchas culturas y quizá hoy estamos llamados a reconocer y relacionar ese caminar . Acá vemos lo que tendría que influir en el deseo de inculturación de la Iglesia hoy, y cuanto hay que aprender de muchas culturas para unirnos en el espíritu
Muchas gracias por esta semana tan enriquecedora. Es muy alentador escuchar el seguimiento del camino que comenzó hace tres años. Creo que esto es lo más valioso que encuentro: aún quedaban algunas brasas humeantes y ahora hay un fueguito encendido que se va haciendo visible.
El espiritu es el que conduce a la Iglesia sobre todo en este camino sinodal que se esta haciendo vemos a una Iglesia expandida por diferentes continentes. Como pueblo de Dios en escucha y dialogo con nuestros pastores y guias.
La sinodalidad, o tiene al Evangelio como fundamento, no no sirve de nada. Y ahí está el punto. Seguir el Evangelio en serio, tiene, forzosamente la cruz de por medio. La estructura institucionalizada, convertida en imperio constantino de siglos, le tiene mucho temor a la cruz, y es preferible “traer los ejércitos de ángeles” que el mismo Jesús no quiso, para que “defienda esto”. Pero Su Reino, no es de este mundo… y eso no lo acabos de entender.
Tronos, dominaciones, principados, potestades, todo fue creado por Él y para Él, pero esto pertenece plenamente a ese Reino que no es de aquí, donde las joyas, palacios, grandes templos y catedrales llenos de oro, custodias, mitras…y un enorme ETC… NO SON EVANGELIO! De ahí la necesidad de la conversión, y la admisión de que estos conceptos son molestos e incómodos, incluso a los sacerdotes, fariseos, obispos, cardenales, saducesos (así, formados en la misma fila), y que se juntarán, para conspirar, cómo matar a Jesús.
Muy de acuerdo con su valioso comentario , en realidad por muchas ocasiones no se ejecuta lo que se predica y ese es el inconveniente que muchas personas dejan de pensar que no existe la solidaridad y la predicación del evangelio de corazón.
De verdad este curso nos sirve mucho para enriquecer nuestra espiritualidad , muchas gracias por todo su conocimiento.
De verdad este curso nos sirve mucho para enriquecer nuestra espiritualidad , muchas gracias por todo su conocimiento.
Todas estas experiencias nos enseñan a ser mejores seres humanos y aportar de manera positiva a nuestra sociedad.
Quiero recalcar con qué temas destacados concluyó en España la etapa de escucha: el papel de la mujer y de los laicos, mayor presencia de los jóvenes, el perdón y reparación en casos de abusos, la familia, y el diálogo ecuménico e interreligioso. Estos son los grandes desafíos a los que responder, desde la humildad, el compromiso y la transparencia; sin olvidar otras cuestiones como el celibato opcional, y la ordenación de casados y de mujeres. La audacia se hace necesaria.
Estoy de acuerdo con quienes han dado sus aportes, el curso muy iluminador. Las experiencias de cada uno de los continentes me tocaron profundamente, como dice Fr. Germán Alonso, me ayudaron a expandir la tienda de mi pensamiento eclesial. También los aportes de los compañeros contando experiencias, confrontando con textos y testimonios enriquece. Una vez más confirmo que la iglesia es humana y como tal se ha equivocado pero está en camino y se puede ver signos de vida como el reconocimiento de sus fallos, el pedir perdón, los esfuerzos por caminar con otros. Veo con más claridad el valor de la escucha y lo siento un desafío personal y de la Iglesia, valoro los círculos de escucha como espacios de sanación y reconciliación… con toda esta riqueza mayor nuestro compromiso pero no podemos solos necesitamos la luz del Espíritu y la disposición de todos.
El presente sínodo nos abre una nueva oportunidad para escuchar al Espíritu Santo y volvernos más sensibles a su voz a través del sensus fidei fidelium en los signos de nuestro tiempo.
De ese moso estaremos en capacidad de responder a las necesidades del Pueblo de Dios que camina junto con los otros peregrinos hacia la casa del Padre, transformando este mundo en más humano, un mundo realizado de acuerdo a Su Voluntad (“así en la tierra como en el cielo”) en el cambio de época que nos ha tocado vivir. Labor que ha de realizarse con los dones que el Espíritu dispensa.
El curso cada vez mas bueno me está ayudando a comprender mas a profundidad el camino sinodal una maravilla ver y recordar que esto no es nuevo pero poco conocido la sinodalidad parte desde el EVANGELIO y es lo que fundamenta todo lo que decimos y hacemos pero para ello es importante la actitud de escucha, diálogo, y humildad para acoger lo del otro y se pueda trabajar desde una participación activa propio de los bautizados solo así viviremos en sinodalidad
La riqueza de los aportes y exposiciones no puede caer en olvido. El Señor habla y si de verdad somos “oyentes” , hemos de oír. En presente, continuamente, ahí donde estamos plantados.
A la vez ir ensanchando nuestra tienda, nuestro corazón y nuestro espíritu, nuestra capacidad de otear el horizonte y de asombre ante las maravillas que el Señor sigue operando en medio de su Pueblo.
Gracias por lo que estamos recibiendo.
Todas las ponencias maravillosas. Lo que más resalto para mi, entre la relación entre misión y sinodalidad, es la misión , el anuncio, el testimonio en relación abierta con sus cultura y su experiencia, con ese modelo donde unidad y diversidad , dan lugar a proceso de integración de anuncio y de diálogo,que lleva a una Evangelizacion en lo social y de anuncio del Evangelio. La Iglesia que camina junto a la sociedad, la Iglesia pueblo de Dios en medio de los pueblos y sus culturas. La Iglesia pueblo de Dios que encuentra su recepción en sensual fidelis, que da un sexto sentido a toda la Iglesia bajo la acción del Espíritu. La Iglesia sinodal que no se agota sino que avanza como Iglesia pueblo de Dios en camino.
Sr Luis al igual que usted me maravilló de la Acción del Espíritu en los diferentes continentes y culturas, promoviendo tantas iniciativas hasta de las que parten del dolor de víctimas, como el Espíritu se abre caminos para mostrarnos su presencia en nuestras vidas para extender el Reino de Dios
Cierto, todos desde donde estemos tenemos que colaborar
Quiero resaltar frases importantes de los ponentes tales com: “lo permanente es el pueblo de Dios” Es necesario escuchar lo que el Espíritu de Dios dice a la Iglesia. Discernir en común es la misión de la Iglesia. “La Iglesia que escucha promueve la conversión y la reforma” . Esto es lo que nos hace falta aún y tenemos que trabajar mucho en ello.
Muy importante el Sensus Fidei o sea el sentir de la fe del pueblo y así la Iglesia siempre estará aprendiendo.
Fue una alegría saber que el Canon de Derecho Canónico de 1983 puso énfasis en las reformas de la Curia romana sobretodo en la intervención de los laicos.
Los testimonios de los diferentes países que nos presentaron nos aportaron nuevos conocimientos de la sinodalidad en sus lugares. Algunos como Europa y América del Norte ya escuchábamos hablar de ello en nuestros países de Latino América. Muchas gracias.
Gracias a todos/as por sus valiosos aportes y experiencias!! Me quedan resonando muchos ecos. Un de ellos, en particular, es el desafío planteado por Carolina Bacher al final de su exposición sobre experiencias en América Latina, que nos llama a comprender que este caminar juntos refiere tanto a la Iglesia como al camino que como cristianos y cristianas hacemos junto a los pueblos, con otras personas e instituciones para que los pobres sean sujetos de su desarrollo y de su destino. Es un camino complejo, requiere profunda conversión, mucha escucha y apertura a los demás y al Espíritu para poder discernir juntos los signos de estos tiempos y generar las transformaciones necesarias en unidad, contemplando la diversidad. Pero como ella nos dice en el cierre: ” Así podremos como Iglesia constituirnos como signo e instrumento de la fraternidad universal”
Comparto totalmente su comentario Fr. German Alonso.
Comparto totalmente su comentario Fr. German Alonso.
Deseo comentar y expresar sentimientos sobre la experiencia del presente curso. Durante la segunda semana, varios de los temas me recordaban a grandes teólogos, que impartieron clases durante mi formación de Lic. en Teología, formación que no termina sino continúa durante toda la vida.
Es importante visualizar el futuro de una Iglesia Sinodal que ha iniciado el camino de renovación marcado excelentemente con prudencia, discernimiento, análisis reposado y millones de consultas, pero que no pierde la memoria histórica antigua, intermedia y reciente.
Aprender y recordar que el amor de Dios, la vida de Jesús de Nazaret y la fuerza del Espíritu Santo continúan revelándose en la Sagrada Escritura y la Tradición, particularmente en momentos clave que pueden comprenderse como signos de los tiempos para y en nuestra querida Iglesia. Revelados especialmente en personas como el Papa Francisco y en cada persona que colabora de diferente manera, dando parte de su vida a los demás estos años de entrega generosa. Dios les multiplicará su misericordia.
Pienso igual que usted hna. Rita. La riqueza en todos los vídeos es inigualable. Atraviesa la historia sin perder el presente y futuro eclesial.
Es impresionante la unidad a pesar de la pluriculturalidad y diferencias de idiomas. Tenemos un idioma común: la fe y el amor.
He disfrutado con las conferencias el retomar la sinodalidad desde los comienzos de la Iglesia y su caminar dando respuestas a cada tiempo dando otra forma de ser Iglesia siendo fieles a la manifestación del Espíritu en cada tiempo. También me ha encantado el aporta a la sinodalidad de cada continente y que América del Norte solo se hay referido al Canadá…, en cambio Asia ha incluido algunos países.
Agradezco al Papa Francisco y a todas las Iglesias que nos hemos metido en intentar caminar en la sinodalidad con sus luces y sombras. Mari Paz España
Hola. Estos videos compartidos sobre la eclesiología de la sinodalidad han sido luz para mi vida espiritual pues me han permitido reflexionar y profundizar sobre varios temas y abrir la mente a realidades diferentes y al mismo tiempo similares, en nuestra iglesia católica. Me parece muy interesante escuchar los testimonios y los aportes de nuestros hermanos de otros continentes. Pidámosle al Espíritu Santo la gracia de discernir lo bueno de lo malo, lo justo de lo injusto, lo correcto ante los ojos de Dios, para ser participantes y protagonistas del cambio en nuestras comunidades parroquiales, siempre con la intención de dar gloria al Señor con nuestras acciones.
Muy buena también está semana del curso. Gracias por todos los aportes y perspectivas tan valiosas y que permiten ver un pluralismo en un mismo deseo de caminar juntos. Pienso que la oración es fundamental para acompañar todo este proceso que necesariamente debe estar guiado por el Espíritu Santo. Tanto a nivel personal como sobre todo en Comunidad debemos hacer una lectura también orante de estos materiales y testimonios.
Hola buen dia
Los temas son muy interesantes y necesarios para dar la gran transformacion en una iglesia sinodal en las iglesias locales , quiero decir una iglesia de escucha en dialogo con los documentos de puebla y medellin.
Temas como el pueblo de Dios , Sensus fidei, la mujer en la iglesia, son temas claves para la iglesia de salida quiero decir una iglesia con los pobres.
Las experiencias son muy claras e interesantes. por ejemplo en America Latina seria muy positivo que la conferencias episcoplas y el celam se conviertan a la sinodalidad, la espiritualidad de la sinodalidad les puede ayudar a formar una comision de la verdad para pedir perdon por la exclusion y persecucion que sufrieron algunos teologos de la liberacion , obispos , sacerdotes y laicos , profesores.
Me parece importante lo que usted indica, de reconocer el trabajo de personas que su vida es una entrega y servicio. También subrayo los diversos caminos que se potencian para que las víctimas sanen, los circulos de escucha, el camino del perdón y de reconciliación y crear procesos justos para todas las personas implicadas.
Gracias por compartir las difereentes experiencias, nos queda una gran tarea, cómo todas estas luces las implementamos en todo espacio en el que nos encontramos. Buen día.
Es una riqueza descubrir a través de este camino sinodal de este caminar juntos, es un trabajo en equipo, todos somos pieza importante para nuestra Iglesia, está en nuestras manos darle seguimiento, y que con nuestro tstimonio logremos unirnos como verdaderos hermanos, me impacta el conocer el trabajo realizado en los diferentes países. Muchas gracias.
Muy de acuerdo con vos.
Entiendo que estamos llamad@s a un contante discernimiento y dialogo en comunidad (sinodalidad) además de estar en la permanente escucha de todas las realidades, y de la sociedad en la que vivimos.
Tod@s somos protagonistas y corresponsables
Las iluminadoras exposiciones a través de los videos y experiencias, me aportan un marco más enriquecido para apreciar el cambio que el Espíritu Santo a través de sus carismas en el pueblo de Dios, nos dona en cada ciclo y etapa de la historia, integrando los aportes de todos y todas en un “sensus fidei” en el que confluyan testimonios diversos, para que a su vez se vaya dando un “sensus plenior”, como nos ilustra la comparación de Mt 12,52 ” “Por eso todo escriba que se ha convertido en un discípulo del reino de los cielos es semejante al dueño de casa que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.”
La Iglesia, Pueblo de Dios, que peregrina en misión para la Evangelización de todos los fieles, nos enseña que juntos y juntas trabajamos por el reino de Dios con los dones del Espíritu Santo que nos anima, fortalece y defiende, para que con la escucha amorosa y armoniosa , el discernimiento en común, la toma de decisiones y la actuación, podamos encontrar la justicia, la paz, la reconciliación entre los hermanos separados, la inculturación de los pueblos, la integración y la participación de todos los fieles en la vida y gracia santificante con Cristo, en Cristo y por Cristo. Celebremos pues, el gran deseo de una Iglesia Sinodal para gozar de una vida plena en comunión con la Santísima Trinidad..
en medio de una sociedad donde se hace tantas lecturas resentidas de la historia me ha parecido maravilloso ver todo lo que tenemos en este camino de la sinodaliad, que no es una moda o un slogan más sino la necesidad de resaltar los valores del trabajar juntos en la historia, del despertar de conciencia de pueblo, comunidad peregrina que se hace vida en lo cotidiano del servicio y reconocer que hemos tenido tantos testimonios y valores que hacen que este camino de la sinoalidad pueda ser más relevante y ante una sociedad donde el ego se ha inflado por todos lados los discipulos del misterio de vida en Cristo sepamos mostrar esa novedad del evangelio en el hoy del individualismo social. gracias por esas ponencias que despiertan la conciencia de lo que somos: Iglesia pueblo de Dios.
Agradezco mucho al Boston College este curso gratuito porque puede llegar a muchas personas y me parece una gran contribución para nuestra formación. Particularmente agradezco la comunicación de las experiencias de otros continentes porque además del conocimiento, me da mucha esperanza darme cuenta del trabajo del Espíritu a través de la cultura y del esfuerzo respetuoso de tantas misioneras y misioneros que han promovido las comunidades cristianas y las comunidades eclesiales de base. De igual forma veo cómo saca bienes de los males e impulsa reformas radicales que nos vuelven a los principios. Gracias.
Una dato muy importante que me queda de las exposiciones, es que nuestros continentes y comunidades eclesiales locales hemos avanzado a distintos ritmos en la sinodalidad, y, también, con distintas comprensiones y aplicaciones de la teología sinodal. Lo cual me sugiere, que el camino sinodal será también diverso, ajustado a los tiempos, problemáticas y geografías eclesiales de cada región. Sin embrago, creo que en ningún caso, el camino sinodal sea desestimado.
Muchas gracias a todos los que han expuesto los temas de esta semana. Ha sido un gran regalo para que podamos entender mejor la importancia de la Sinodalidad. La Sinodalidad nos involucra a todos para que todos sentimos mas co-responsables i no mero expectadores. Dejamos que el Espiritu Santo nos conduzca en nuestra caminar juntos. Las temas tratadas han sido muy valiosos para que comprendamos en una forma mas amplia el camino de la Sinodalidad.
Pensar y ubicarnos en la Iglesia post conciliar, con actitud y decisión sinodal, nos compromete en primer lugar a la escucha del Espíritu Santo, que nos anima a humanizar nuestro mundo reconociendo y valorando nuestras diversidades para actuar comprometidamente en colaboración y complementariedad entre todos los humanos, sin distinción alguna, poniendo en acto los elementos del camino sinodal: la escucha activa, el discernimiento y toma de decisiones comunitarios, la inclusión participativa de las mujeres en la vida y misión de la Iglesia. Juntos compartiendo la Buena Noticia desde las periferias, los últimos, los preferidos del Reino; los testimonios de nuestros hermanos y hermanas de los distintos continentes nos han demostrado que sí es posible, que el Reino está actuando
Así es Jorgelei, todo es obra del Espíritu Santo; si nos dejamos guiar él hará “nuevas todas las cosas” como los hizo en las primeras comunidades cristianas, como lo hizo en el Concilio Vaticano II, como lo está haciendo ahora en camino a la celebración del Sínodo sobre la Sinodalidad y está actuando en este curso que estamos compartiendo
Una formacion muy interesante,
Gracias a TODOS!
Elsa
Gracias a todos los/as expositores/as que con solvencia profesional y vivencial presentaron los temas que ocupan esta Curso. Los temas son fundamentados y desarrollados con claridad lo que permite ampliar el contenido, el sentido y en especial el espíritu de la Sinodalidad. Me pregunto al respecto entre muchas otras, sobre dos situaciones concretas. Por un lado la urgencia de formar a los laicos en esta “conversión” eclesial, pero asimismo y con más urgencia aún, formar al clero. A los primeros nos toca asumir el cambio desde la vocación discipular y la responsabilidad que nos cabe a partir de nuestro carácter de bautizados y por nuestra opción de fe; a los segundos incorporar este nueva estructura eclesial que significa renunciar al “pedestal” jerárquico, para ejercerlo desde el llano, desarrollando el espacio laical y promoviendo ocuparlo con espíritu sinodal. Tarea nada fácil porque se trata de transformar un modo jerarquico cultural avalado por siglos de aplicación. En tal sentido me preocupa que en muchas parroquias ni siquiera se han enterado de la palabra sinodalidad. No cabe duda que todo cambio necesita tiempo, superar la etapa de rechazo y resistencia, y pasar a la de aceptación, valoración y compromiso de los actores involucrados. Por eso no se pueden establecer tiempos, cuano se trata de conversiones. En este caso “convertirse” a la sinodalidad, proveer a nuestro intelecto y a nuestro corazón de una nueva “versión” eclesial.
Considero que para aquellos encaminados hacia la sinodalidad, vislumbramos también que en este caminar juntos en escucha, diálogo, apertura, habrá que ir aceptando la revisión de problemáticas humanas que son postergadas o rechazadas para dicha revisión, tal el caso por ej. el dicasterio, el ministerio del orden para la mujer, el desafío ecuménico e interreligioso, etc, De todos modos, lo positivo es que comenzamos a caminos juntos, respondiendo a la voz del Espíritu, quien seguro nos ayudará a perdurar, a extender manos y nos iluminará el camino.
Muy de acuerdo. Todos somos protagonistas y corresponsables, pero, cuántos asumen realmente esta corresponsabilidad y se hacen protagonistas?
Por estos lugares no veo mucho, cuesta abrirse, “expandir la tienda”… y no queremos dejar nuestra zona de confort
Comparto totalmente tus comentarios
El sentirnos que somos parte de la Iglesia, del pueblo de Dios, nos compromete a aportar el granito de arena por el Reino de Dios, en un proceso constante de sinodalidad y apertura a la acción del Espíritu Santo que renueva todas las cosas. Gracias por las exposiciones y experiencias que comparten que nos iluminan y nos ayudan a sentirnos comprometidos a anunciar la Buena Noticia.
En esta segunda semana en la cual se reflexiona sobre la misión de la Iglesia en clave sinodal cobran importancia algunos elementos que deseamos destacar. El primero de ellos es “el lugar” en relación a la noción de Pueblo de Dios. Que permite comprender que Pueblo de Dios no es una idea abstracta sino que tiene coordenadas espacio, temporales, culturales concretas – y otras- donde hunde sus raíces y cobra verdadero sentido. Además toma valor el Sensus fidei que implica el desafío de “escuchar” con atención al pueblo, a la gente. Esta acción en clave sinodal presenta al mismo tiempo el desafío de abrir el abanico de posibilidades para escuchar a todos –como ideal- o a los que más se pueda. Me pareció sumamente importante también el desarrollo del tema de las vías ya abiertas presentes en el Código de Derecho Canónico (CIC) porque nos recuerda que tenemos ante nosotros posibilidades para actuar, caminos para transitar, que si bien aún hay cambios que esperar, tenemos posibilidades de acción, que ya están presentes. Finalmente quiero destacar como último punto, pero no por ello menos importante, la presencia de las mujeres en la Iglesia, personalmente creo que es significativa en todo sentido, en las diversas comunidades, en las acciones pastorales, en las mesas académicas y de debates, etc. Lo cual me parece una riqueza que el tiempo sinodal ha permitido visibilizar.
Me alegra mucho leer los comentarios que estan haciendo en relación a la sinodalidad de la Iglesia. Así como escuchar la experiencia sinodal que se está viviendo en todos los continentes.
La sinodalidad como modo de ser y de actuar de la Iglesia es hoy un desafío como también lo ha sido en otros tiempos. En este sentido, considero importante, hacer una lectura de nuestra historia en su propio contexto, para retomar el camino sinodal, superar errores que llevaron a apartar a la Iglesia de ese modo de ser y así permitir que sea el Espíritu Santo quien nos renueve como Iglesia, pueblo de Dios que somos.
Particularmente me gusta mucho, la capacidad de la Iglesia de cuestionarse así misma, hecho muy marcado en Concilio Vaticano II, lo cual estamos llamados a concretizar en nuestras comunidades.
Saludos
De acuerdo contigo Rosa.
El Concilio Vaticano II nos ha dejado no solo un recuerdo de tal evento, sino un gran desafío que a más de 50 años.
La misión es grande, pero más grande es Aquél que nos envía a anunciar su reino en el mundo, no como mero discurso, sino en lo concreto de nuestra existencia.
Mucho ánimo e tu misión
Considero que los temas han estado muy variados en cuanto a su contenido y calidad expositiva. Creo que la sinodalidad no es que ahora los laicos tomemos todas las desiciones en la iglesia. sino que sigamos la propuesta de uno, muchos y todos, en donde a cada quién le toca hacer su parte. Me gustó mucho el tema del Sensus Fidei en la vida y misión de la Iglesia sinodal.
Sinodalidad: escuchar al otro con la intención de armar una relación basada en proyectos comunes de evangelización.
Agradezco de corazón todo el aporte de esta semana por la luz que pone, tanto en la comprensión de la sinodalidad, como de su presencia en la Iglesia en los diferentes continentes desde hace tiempo. Celebro que se nos brinden estas experiencias, que nos dicen hasta qué punto el Espíritu está presente y nos guía en la medida que nos vivimos abiertos y colaboramos con El.
Me ha impactado, sobre todo, lo que la sinodalidad ha ayudado a la hora de afrontar las secuelas y la sanación tanto de lo relativo a los abusos sexuales en Europa, como a lo que se vivió en Canadá al alejar de las familias a los niños para catequizarlos en las escuelas cristianas.
Me siento solidaria de esta Iglesia humilde y dispuesta a hacer camino en la misma con los hermanos, que se me regalan donde estoy, abierta a la Iglesia universal, con gusto de continuar bebiendo y alimentándome de sus experiencias de Vida
Sí, personalmente también me alcanzó profundamente el Sensus fidei…ojala cada uno sepamos alimentar cada día nuestra fe para poder vivirnos y hablar desde ella con nuestros hermanos en la Iglesia y fuera de ella
Muchas gracias por los aportes de esta segunda semana. La profundización eclesiológica aporta muchos elementos para llevar a cabo, en lo concreto, el camino sinodal.
La diversidad de visiones y acentos enriquece mucho la temática.
Después de ver los insumos que se nos han proporcionado para profundizar en el tema eclesiológica de la sinodalidad, me surgen dos preguntas: la primera, ¿estamos preparados para vivir la sinodalidad en la vida cotidiana?, y la segunda, ¿realmente estamos haciendo ese proceso de conversión/metanoia para hacer que la sinodalidad sea connatural a nuestro actuar humano?
Me vuelvo a confirmar que el Espiritu ha acompañado siempre a su Iglesia y se ha manifestado a través de la historia en conatos y prácticas de sinodalidad. Ahora es la hora de irla conquistando y viviénddola con claridad y de manera más integral. Caminemos juntos y en comunión para lograrlo, el Espíritu está y viene con nosotros.
Buenas tardes. Las distintas exposiciones de la semana han permitido que pueda profundizar en algunas ideas, criterios y actitudes. Van algunas de ellas
1.- Sandra Mazzolini nos plantea la relación entre la sinodalidad y la misión de la Iglesia en clave de servicio y discernimiento. Además plantea la categoría de relacionalidad basada en el diálogo como elemento constitutivo de la misión y de la sinodalidad. Independientemente la función que realicemos dentro de la Iglesia, todos estamos llamados a esa relacionalidad basada en el diálogo en clave de servicio y discernimiento. Entendería que esto supone una real conversión para todos los creyentes y bautizados.
2.- De lo expuesto por Rafael Lucianni me parece que hay dos elementos claves: la recuperación de la idea y concepto de Pueblo de Dios y que la actitud de la Iglesia debe ser diálogo, discernimiento, tomar consejo, la elaboración y la toma de decisiones y la rendición de cuentas… son dinámicas comunicativas, constitutivas del modo de ser y de proceder en la Iglesia. Me atrevería a pensar que es más fácil llegar a ello cuando nos sintamos Pueblo de Dios. El peligro que se presenta entendería que doble: a.- pensar o creer que son los otros los que tienen que volverse Pueblo -porque asumo muy ligeramente que yo ya lo soy-; b- el desaliento que puede provocar que las pequeñas comunidades o iglesias locales -empezando por las parroquias o quizás movimientos apostólicos- mantengan esa postura clericalista que impide el diálogo y que por tanto no escucha con lo que el servicio y el discernimiento se vuelve impensable.
3.- De la ponencia El Sensus fidei en la vida y misión de una Iglesia sinodal de Ormond Rush, me quedo con:
Iglesia que enseña pero también Iglesia que aprende porque Escucha
Discernir los signos de los tiempos a la luz del Evangelio
Escuchar es más que oír, escuchar significa que todos tenemos algo que aprender
El Espíritu no es propiedad de la Jerarquía Eclesial
Pero aquí también creería que la “tentación” está en creer que “yo sí y que los otros no…” o “ojalá esto lo escuche el obispo, el párroco, el fulanito o tal o cual persona”.
Los laicos tenemos la obligación no solo de cambiar nuestras actitudes clericales, sino que debemos ayudar al sacerdote, al religioso, a la religiosa, al obispo a que cambien o al menos a proponer actitudes de cambio.
4.- De lo expuesto y compartido por Dorothea Sattler creo que es relevante el que se entienda que la mujer no es “un elemento decorativo” es creo yo un “sujeto determinante” en el proceso de Evangelización. Existen mujeres, algunas religiosas otras laicas, -ojalá haya cada día más- perfectamente formadas y de lejos mejor preparadas que muchos sacerdotes. Ahora bien, lo importante es que los laicos nos formemos, que crezcamos, que maduremos en la fe y en los conocimientos.
5.- La ponencia Vías abiertas y desafíos en el Código de Derecho Canónico para una Iglesia corresponsable me ha enseñado que el Derecho Canónico -absolutamente desconocido para mi- sí ofrece algunas posibilidades y que potencialmente puede ofrecer más realizando algunos ajustes y modificaciones especialmente en lo relacionado al Consejo Pastoral.
En esta ponencia se ha dicho algo que creo que está a la base de todo lo expuesto en esta segunda semana y también en la anterior: si no hay un verdadero deseo, una verdadera actitud de escucha y discernimiento que me abra, que nos abra, al accionar del Espíritu la sinodalidad y la participación en la vida de la Iglesia no cambiará. Y esto es algo que nos compete a todos los creyentes, a todos los bautizados.
Buenas noches
Me siento muy motivada y dispuesta a continuar colaborando en mi comunidad parroquial, luego de escuchar la riqueza de eso continente y el entusiasmo mostrado por cada expositor en emprender el camino sinodal , interior y exterior rompiendo todos los obstáculo, guiado por el espíritu santo y renovar nuestra fe , cultivando el valor de la escucha y el discernir juntos.
Fantásticos los aportes experienciales. Me conmovió especialmente el de Canadá.
Me llamó la atención la experiencia de sinodalidad en Europa y su vinculación con los abusos sexuales. Me parece genial y pastoralmente necesario usar el instrumento de la sinodalidad para ejercer espacios de reconciliación, especialmente en experiencias que involucre ruptura de relaciones en ambientes eclesiales.
Ante esto, la sinodalidad nos posibilita la comunicación que aclara la experiencia, y fomenta el hecho de la toma de conciencia de la estructura en favor de las víctimas, y una clara postura de justicia ante el victimario.
Me siento en sintonía con lo expresado. Gracias.
Estoy de acuerdo, también el aspecto canónico y las propuestas fueron muy interesantes.
SIN LUGAR A DUDAS ESTAS EXPOSICIONES NOS ENRIQUECEN A TODOS COMO MIEMBROS DE UN SOLO CUERPO, LA IGLESIA CATÓLICA. CUÁN IMPORTANTE ES EL DIÁLOGO , LA ESCUCHA , LA PARTICIPATION PARA LOGRAR UNA IGLESIA PEREGRINA MÁS UNIDA. LO QUE NO ESTIMO CONVENIENTE ES LA INCLUSIÓN DEL SACERDOCIO FEMENINO. BASÁNDOME EN QUE, SI BIEN JESÚS LE DIO UN LUGAR A LA MUJER DURANTE SU EVANGELIZATION, ÉL MISMO INSTITUYÓ EL SACERDOCIO A TRAVÉS DE SUS APÓSTOLES. SÍ ESTOY CONVENCIDA DE QUE LA PARTICIPACIÓN DE LAS MUJERES EN OTROS ASPECTS ES EDIFICANTE Y NECESARIA.
Muy agradecida por este caminar juntos en el proceso de abrir nuestra mente y corazón para continuar dando pasos en la sinodalidad. Comienza este proceso de conversión y concientización por cada uno, nadie da lo que no tiene. Me hace comprometerme con gestos concretos y pequeños que harán visible que otra iglesia es posible. Pasando del clericarismo a caminar juntos dónde todos tenemos un rol que desempeñar y nos sentimos corresponsables en hacer visible el Reino de amor justicia y verdad en nuestro mundo actual. Bendiciones para todos.
La sinolalidad no se trata solo de caminar juntos, no es solamente cumplir una tarea más en el templo, es un proceso que no termina porque es una construcción constante, es un diálogo entre los diferentes actores que trasciende, es un compartir donde se involucran diferentes personas o agentes de pastorales practicantes y no practicantes porque se están llamando bautizados y no bautizados ya que es tiempo de continuar caminando juntos para con la unidad evangelizar a los creyentes y a aquellos que no lo son y creo que este es el mejor momento para con el ejemplo sientan el deseo de imitarnos.
Ya es tiempo de pasar de una étapa a otra: el diálogo, la charla, la predica, el compartir porque la sinodalidad no es nueva es una práctica antigua que se remonta como se dijo al principio a las formación de las primeras comunidades con los apóstoles que acompañaban al Señor y ellos también tuvieron que caminar juntos y en su momento de expandirse y otras razones se tuvieron que dividir y eso permitió que más ciudades entraran a la comunidades de la antigüedad.
Tenemos que enfrentar los desafíos y unificarnos para continuar la tarea anunciado el mensajes hombres y mujeres que aún no conocen y con los consagrados como guías y modelos en el proceso sinodal.
La riqueza de los aportes y de las experiencias continetales nos amplían el panorama y a la vez la complejidad del reto sinodal. Escuchaba la experiencia de Asia e imaginaba lo diverso y difícil que es horizontalizar el mensaje y un caminar juntos desde este llamado sinodal: Todo un desafío pero nada imposible con la voluntad de los cristianos convencidos y de la acción del Espíritu Santo que guía e ilumina. A medida que escucho y discierno también me lleno de Esperanza por ver una Iglesia que ya dió el paso a mirarse como pueblo de Dios en un camino , que si bien esta lleno de diversidades tambien está alentado por el llamado a la unidad colegiada, apostólica y misionera,
Es muy interesante como hay experiencias muy buenas como las de Quebec en Canadá entre otras, gracias por la oportunidad que tenemos de terminar con el clericalismo, que nos permita tener una iglesia mas nuestra a la luz del evangelio. y así evitar los abusos que nos están llevando a casi desaparecer.
Estamos a tiempo de revertir esto, animo pues el logro será maravilloso pues encontraremos la verdadera Iglesia que quiere Dios.
De las ponencias y compartires regionales me llamó mucho la atención la diversidad de experiencias las cuales buscan responder a los desafíos que el evangelio anima a responder en las iglesias locales.
Hay vitalidad dada desde el Espiritu la cual es respuesta del seguimiento de Jesús, aunque ello implique incompresiones, diferencias y resistencias.
Escucharse mutuamente y realizar conversación espiritual es parte del camino y aunque hay muchos desafíos si se es fiel a la sinodalidad podremos permitir que el Espiritu de Dios se manifiesta en nuestras vidas, comunidades y permitir que se haga Reino.
Gracias por estas ponencias, han sido muy enriquecedoras y me aportan para el trabajo la Diócesis donde actualmente estoy colaborando.
La actitud de la Iglesia debe ser diálogo, discernimiento, tomar consejo, la elaboración y la toma de decisiones y la rendición de cuentas… son dinámicas comunicativas, constitutivas del modo de ser y de proceder en la Iglesia. esto precisamente se esta tratando de realizar: una consulta para llegar a tomar decisiones, desafortunadamente, hay un pequeño retroceso, pues los laicos están mantienen una postura clericalista que impide el diálogo y que por tanto las decisiones recaen en los presbíteros.
Muchas gracias a esta iniciativa de Boston College, por su aporte formativo a la universalización de la sinodalidad. A través del compartir de las diversas experiencias continentales, nos vamos consolidando en la esperanza manifestada en las particularidades de cada continente, que hacen que, la Iglesia sea de verdad católica, no solo, en el nombre sino, sobre todo, en la realidad.
Vamos haciendo un camino de aprendizaje, lento pero seguro, a pesar de las dificultades. Creo que el Espíritu se hace presente en este camino de discernimiento y de escucha generosa a todos y todas, especialmente de los arrinconados de la historia. Pedro Nel Ortiz
Al igual que Pedro y otros participantes quiero agradecer y destacar la calidad de las ponencias y la riqueza de las experiencias comentadas. Todas ellas nos abren y ensanchan el corazón y siguen convirtiendo nuestra mentalidad para vivir la verdadera comunión en la pluralidad y diversidad de realidades, en una misma iglesia , abierta al diálogo, a la autocritica y a la acogida.
Entiendo que hay mucho camino por recorrer, y así mismo me quedo con la esperanza de tantas búsquedas e intentos. Muchas Gracias
Gracias todo lo aqui dado, a sido de una riquesa enorme para mi.
Paz y Bien
me ha sorprendido escuchar la historia de la Iglesia desde las diferentes problematicas, abusos sexuales, de poder, etc. y como el Papa hace la propuesta de un sinodo, para recomenzar desde nuestras raices , errores, heridas, y con la gracia del Espiritu Santo, tener el corage de continuar, a cambiar, porque el sinodo para mi viene siendo una propuesta de conversion juntos desde nuestras realidades e historias, para poder sanar.
e iniziar una expereincia nueva de Iglesia desde la reconciliazion y el respeto de cada cultura y cada ser humano como mayor expresion de amor de Dios.
Me parece sumamente importante que se le dé un papel primordial al pueblo en el sínodo puesto que todos, indistintamente de si servimos o no en la Iglesia, somos parte de un mismo cuerpo.
También es importante resaltar que el sentido de la fe es lo que nos hace avocarnos a la misión y tratar de que caminemos juntos en una misma dirección, tal como lo decía Jesucristo “que sean uno, como Tú y Yo somos uno”. De ahí la importancia de hacer que todos participen y se sientan parte de cada uno de los procesos de la Iglesia.
Ahora bien claro está que también a la luz de esta sinodalidad hay que darle un carácter legal y dejarlo que se rija por las normas ya establecidas del Derecho Canónico; claro está que este no queda exento de alguna reforma que se le pudiese aplicar en virtud de una mejora como producto de esta sinodalidad.
Saludos fraternos
Agradezco a todos los que pudieron compartir las experiencias de sinodalidad en los diferentes lugares de nuestra tierra, me provoca esperanza el conocer tantas y tantas realidades (no dogo experiencias porque creo que son formas de vida) donde se ejercita tan naturalmente esta forma “en comunidad” característica de la Iglesia nuestra.
Considero que una de las ideas que necesitamos tener clara y siempre presente es que como cristianos católicos somos siempre y desde un inicio “discípulos misioneros” y que así como debemos estar comprometidos con llevar la Buena Noticia a todos los rincones del mundo, también debemos tener claro que el Espíritu Santo ya está presente en esos mismos rincones, al estilo del pueblo que lo acoge.
Gracias también a todos los hermanos que enriquecen este tema con sus intervenciones en este foro, realmente es lindo evidenciar la riqueza de nuestra fe.
Gracias por ayudarme a aterrizar. Gracias por favorecer que me haga preguntas…
Bien las exposiciones. Me gustaría que en otros cursos se tomen más en cuenta expositores de Centroamérica y México, pues en ninguno de los cursos ha habido representación de esos sectores de la Iglesia latinoamericana. Nuestra Iglesia centroamericana creo ha tenido muchas experiencias sinodales, que tal vez no se conocen en Europa, sobre todo. Considero que si no se hacen reformas estructurales, desde la normativa canónica, poco se avanzará en una Iglesia más sinodal, transparente y relacional.
Gracias por tu síntesis. Me pareció iluminadora su frase: La Iglesia enseña y aprende, porque escucha. Gracias.
Gracias a los expositores por las diferencias ponencia que me han ayudado a tener un panorama amplio a nivel global de como marcha la iglesia. cuáles son los aciertos y desaciertos de la iglesia; haciéndome reflexionar de cuál ha sido mi papel y que tengo que hacer para caminar junto con mis hermanos desde la escucha, el dialogo, el discernimiento, las formaciones etc. Como dejarnos guiar por el Espíritu Santo para edificar una iglesia que sea cada día más misionera y fiel al mandato de Jesucristo
En primer lugar, muchas gracias a Boston College por esta gran oportunidad que nos está proporcionando conociendo una diversidad de visiones sobre un tema tan necesario y urgente en la iglesia actual.
La conferencia de Sandra Massolini muy teórica, sin ejemplos concretos.
Me ha parecido muy importante la valoración del pueblo de Dios que reivindica Rafael Luciani, así como la revalorización del sensus fidei como elemento muy valioso en la sinodalidad y fundamental para respetar las diversas opiniones del pueblo de Dios. La propuesta de Dorothea Sattler muy progresista y cuestionable. La propuesta de la jurista Carmen Peña muy clara, con ejemplos muy concretos y útiles para entender la sinodalidad a luz del Derecho Canónico, muy de acuerdo con el comentario de Beatriz Martínez.
Las experiencias muy interesantes, la de Shaji George Kochuthara para conocer las estructuras problemas en las iglesias asiáticas. Las africanas aportadas me han parecido poco concretas y poco detalladas. Mientras que las que aporta Carolina Bacher de América Latina muy variadas e interesantes y pueden servirnos como referentes para aplicar en España.
En definitiva, nos anima, como dice Catherine Clifford, a involucrarnos en este proceso sinodal que está llamado a ser permanente en la iglesia, a pesar de que todavía existan muchas dificultades.
Angelines
Agradezco mucho éste camino que nos están permitiendo vivir a través de éste curso. Muy ricas las expresiones de los expositores. Realmente muy significativas las experiencias compartidas. Nos ayudan a ser una Iglesia más humilde que escucha realidades ( algunas dolorosas) que nos permiten crecer.
Se nos enseñó que la práctica de la sinodalidad es una experiencia formativa que nos llama a honrar los dones de TODOS los BAUTIZADOS. Todavía nos queda un largo camino por recorrer. Muchas gracias por colaborar con éste espacio tan distinguido. ¡Bendiciones para todos!
Primero dar gracias a Dios y al Boston Collage, por esta oportunidad de ampliar conocimiento. Han sido muy ricas las exposiciones de todos los facilitadores.
La Sinodalidad es una llamada a plasmar más eficazmente la condición de la iglesia como pueblo de Dios en camino, tal como lo descubrió el Concilio Vaticano II. El llamado que nos hace Dios a través de la iglesia a cada laico, a todos los miembros de la iglesia en toda su jerarquia a caminar juntos, es un llamado de Amor y Unión, caminar juntos apoyarnos unos a otros.
• El código de Derecho Canónico abrió muchos causes de participación de los fieles en la misión de la iglesia.
Oremos para que cada uno cumpla con el rol que Dios nos tiene.
Gracias por esta oportunidad.
Johanny Ramírez
Lo que aprendí nuevo es la confirmación que la sinodalidad trae conflicto. Pensando, por supuesto esto es la realidad, no puede ser otro. Pero, también creo que este conflicto es sano, es resistencia a la conversión. Y conversión no es fácil. Pero implica que está en la lucha no seguro en la superioridad, ignorando las consecuencias de no ser convertido.
Sinodalidad no es una doctrina, una historia y para decir ni una teología, es una manera de asumir la vida, de convivir.
Nosotros el Pueblo de Dios tenemos que trabajar para poder construir una iglesia de todos, achicando las jerarquías, sintiéndonos todos transformadores de la realidad, esta apertura a la sinodalidad es una oportunidad a mejorar como iglesia, dando por ejemplo el debate del Diaconado femenino por ejemplo, que el Espíritu Santo nos guié
Si las conferencias de la primera semana me gustaron, las de esta segunda, aún más. Muy claros todos los conceptos y todas las aportaciones con una misma conclusión: es el Espíritu Santo el impulsor de esta “revolución” en la vida de la Iglesia universal. Difícil el camino que se nos presenta, pero a la vez, todo un reto que seguro sabremos afrontar con confianza en el Padre.
Si he de destacar algo, me quedo con las experiencias sinodales de América Latina y con la experiencia del círculo de la escucha en Canadá.
Y lo mejor es la sensación maravillosa de que a pesar de las diferencias de idioma, cultura, país, raza… a todos nos une nuestra fe en Jesús.
Muchas gracias, Hermín por lo que expresas. Me han parecido muy profundas y esperanzadoras, a la vez que concretas, las conferencias de esta semana pues muestran algo de lo que ya se está haciendo desde la experiencia de comunidades de diversos lugares. Compartirlas, aprender de ellas, abre nuevos caminos.
Me parece fundamental tomar conciencia de que la iglesia es Pueblo de Dios que, como dice Luciani, se hace realidad en un lugar, en la iglesia local. Con alegría espero que este movimiento, e iniciativas tan valiosas como este curso, nos ayuden a hacer el camino de la sinodalidad.
Toda la temática me pareció interesantísima, nos reafirman la idea central de sinodalidad. Sinodalidad es la lucha del Espíritu, que nos empuja al viento del aire fresco, que nos ofrece el Papa Francisco y las enriquecedoras experiencias de sinodalidad que ya se viven en algunos sectores de nuestra Iglesia. Todo en armonía sin dejar de poner los ojos en Jesús, como nos recordaría el padre Esteban Gumucio Vives sscc. Gracias a todos por su participación…
Muy interesante y enriquecedora esta formación sobre la sinodalidad en los diferentes continentes . Se supone que al caminar juntos es no hacer distinción entre razas, cultura, situación económica de familia, de los más pobres. Ante Dios todos somos iguales con diferentes dones que debemos administrar adecuadamente y ver y ayudar la necesidad del prójimo, pero esto a veces no se cumple , porque tenemos sociedades muy cerradas, donde se desprecia las razas y los mas pobres.
En nuestras parroquias se esta formando a los fieles laicos en cuanto a sinodalidad, y en los diferentes escenarios de pastorales de la parroquia se están dando más participación a los laicos , pero falta mucha motivación y más formación y compromiso.
Saludes.
He visto y escuchado con especial atención e interés cada uno de los videos. Me alegra percibir tanta diversidad en los ponentes. Me alegra haber escuchado explícitamente algo que me parecía intuir: que no solo las síntesis reflejen las aportaciones de las iglesias locales sino que las iglesias locales se sientan reflejadas en las síntesis y en el documento continental.
El camino de la Sinodalidad nos convoca a ser dóciles a la acción del Espìritu Santo, a discernir desde cada realidad el alcance de la misma. Tenemos que dar apertura a participación de todos, teniendo como norte los carismas de cada grupo y/o congregación religiosa, sin asumir actitudes y responsabilidades que no corresponden. Seguimos luchando en varios paises con el clericalismo, así como la presencia de formas de participación que distan de lo que se busca. La iglesia pueblo de Dios, es el concepto clave en este momento, así como conocer y disfundir las experiencias de sinadalidad en los distintos continentes.
Hola Angela, coincido con la fresa que mencionas, estamos llamados a ser evanglizadores en la periferia, los excluidos, no solo en referencia alos pobres, como lo emcnionas debemos pensar en los jóvenes, ¿cómo entiende en camino sinodal? ¿Qué debemos hacer para que se sientan parte activa ?
Gracias por tu aporte
Retomo este trozo de canto “Iglesia soy y tú también, en el bautismo renacimos, a una vida singular ” para expresar la invitación que se nos hace desde la sinodalidad, SER Y SENTIRNOS, no sólo ir a la iglesia o estar en la iglesia.
Al escuchar las diferentes experiencias aun desde los orígenes de la iglesia y lo sucedido en distintas épocas, queda clarísimo que nuestra Iglesia es Santa y pecadora, pecadora justamente por nosotros los humanos, en este caso religiosos y sacerdotes que en muchos momentos permitimos que sea nuestro ego, soberbia, necesidad de poder y superioridad los que primen en nuestro modo de prodecer: a la hora de imponer en lugar de consultar, someter en lugar de acompañar, hacemos todo lo contrario a lo que nos propone Jesús desde su evangelio.
Es muy interesante el trabajo que se viene realizando en distintas diócesis de cada continente, muestran la riqueza y la buena voluntad de Sacerdotes y religiosos acompañados por los Laicos haciendo de la iglesia “La Iglesia de Jesucristo sinodal.
Oremos para que sea el Espíritu Santo quien continúe guiando y purificando nuestro ser como Iglesia.
La iglesia siempre ha esta abierta a la participación de todos, como hemos visto últimamente para que la mujer tenga más participación se ha creado nuevos ministerios instituidos donde la mayoría son mujeres, como lo es el ministerio de la catequesis, por eso vemos como el Espíritu Santo actúa y mantiene su soplo para así continuar con esta obra de Cristo Jesús
La Sinodalidad es todo un desafío para la cultura del individualismo que nos asfixia. Pero no es nada nuevo en la historia de la humanidad ni del cristianismo. Las experiencias compartidas desde todos los Continentes me han puesto en sintonía con las organizaciones de las colectividades mayas prehispánicas y que perviven en los pueblos mayas en Guatemala, para poner un ejemplo. Es observable en la siembra del maíz, en la vida comunitaria de la fiesta de algún santo católico que disfraza un personaje de su espiritualidad, el reencuentro con los ancestros en los aniversarios de difuntos, etc.
Las CEBs que se hicieron testimoniales en Centro América, sobre todo en El Salvador, también han encarnado la sinodalidad como un estilo de vida comunitario y ministerial. En 1979 Monseñor Oscar Arnulfo Romero ya había confiado a las mujeres consagradas la administración pastoral de algunas parroquias y tuve la gracia de ser enviada en misión a una de ellas allá en la montaña, donde se extendía la Arquidiócesis. Es de reconocer y hacer público los pasos que se van dando en el camino de la Sinodalidad y los retos que están por delante: En América Latina: la labor del Celam, la Clar y su compromiso con la Querida Amazonía…
El tema del clericalismo, los abusos, el tribalismo y la cerrazón que denuncia Europa es todo un llamado a la reforma y a la conversión pastoral que involucra a toda la Iglesia, desde una actitud de apertura y escucha. A este llamado se suma Canadá y Norteamérica evocando la tragedia del colonialismo que se dió también en mesoamérica con la misma crudeza que esos países, pues la escuela fue el espacio de eliminación de las culturas originarias con la prohibición de idiomas, vestimentas, costumbres, etc. e impsición de la cultura y religión dominante. Como hay que aprender de los errores y nunca más repetirlos como nos dice la ponente, promovamos los círculos de escucha, de discernimiento, de reconciliación. Ese ya es un buen aporte a la Sinodalidad. Seguir impulsando las CEBs y los valores de las espiritualidades de nuestros ancestros que encierran la riqueza de la vida comunitaria que Cristo propone en el Evangelio y cuya semilla ya daba fruto en nuestros pueblos.
Muy de acuerdo, el protagonista en todo este proceso es El Espíritu Santo y hace falta más apertura y docilidad a sus mociones. Con un nuevo Pentecostés que depende de nuestra actitud orante y receptiva de sus dones haremos frente al demonio del clericalismo que está haciendo estragos en las parroquias y diócesis. En mi parroquia tengo dos años de estar ofreciendo mis servicios para fortalecer la pastoral y no soy escuchada, me han excluido de espacios de comunicación social y formación de catequistas. Me he quedado en las bases, haciendo camino y acompañando a los más vulnerables y pobres: enfermos, ancianos abandonados, mujeres abusadas, hago un trabajo de escucha y fortalecimiento humano y espiritual, sin ruido, invisible. Interpreto que es el espacio que el Espíritu quiere para mí, independientemente de que sea decisión clerical de marginación.
La realidad es que son los laicos quienes sacan la tarea y eso que tienen la responsabilidad de una familia, un condicionamiento laboral y las presiones económicas y endémicas. Pero siempre están disponibles, el Párroco sólo pide y ellos obedecen con creatividad y entrega. Admiro mucho a los laicos por su capacidad de donación de su tiempo, por su sacrificio del descanso y su disponibilidad al servicio y la fraternidad.
Sí, el Papa Francisco nos anima siempre en este camino de sinodalidad con sus catequesis de los miércoles y los domingos, sus cartas y exhortaciones, sus homilías … gracias a su voz testimonial nos animamos a seguir adelante a pesar de los obstáculos dentro y fuera de la Iglesia.
De acuerdo contigo Nuria. Ahora entendí el propósito de la visita del Papa Francisco a Canadá.
Y la experiencia de la Asamblea Eclesial promovida por el Celam es una señal del Espíritu que se mueve en la Iglesia.
La estructura de la Jerarquía es un asunto difícil, hay que seguir clamando por la participación de la mujer hasta que se consiga el diaconado y no sólo para las mujeres consagradas sino para todas las laicas comprometidas: madres de familia, obreras, campesinas, profesionales…
Bueno, también para los varones no es que se den tanto el espacio y la oportunidad para el diaconado. Que siga el debate.
Hermana Patricia, cierto lo que dices. El conflicto siempre va a estar presente, sobre todo cuando se hacen opociones por la verdad, la igualdad, la justicia, el cuidado del vulnerado, la madre tierra, etc. Y es que no podemos ser cómplices con el silencio, la falta de postura, la indiferencia. Entonces nos metemos en líos y viene la estigmatización, la persecución, el silenciamiento, la exclusión y tantas formas de quitarnos de enmedio. Es la historia de la redención y las mujeres llevamos la delantera en manejar problemas con dignidad. Animo, no estamos solas.
Me parece especialmente importante plantearse el papel de la mujer en la Iglesia, y dentro de ella, en los procesos sinodales.
Creo que hay fundamentos de sobra, como ha expuesto una de las ponentes, para abordar con seriedad y apertura de miras estos temas. Todo lo que no avancemos, se volverá en contra de toda la Iglesia.
Decir que las ponencias fueron enriquecedoras, es casi que redundar. Destacaría la importancia de la fundamentación de la práctica sinodal, para evitar tanto el “sentirse bien” como formas de parlamentarismo.
Hay elementos fundamentales, como la realidad del bautizado, el prioridad del Pueblo de Dios sobre los servicios ordenados. Que deben, por supuesto, aterrizarse en formas de escucha y participación, lo que implica la creación/invención de nuevas estructuras.
Dentro de este proceso, que tiene una base sólida en la Escritura y tradición, necesita una necesaria comprensión sociológica y comunicativa. Puesto que el Espíritu es encarnado , todo viene asumido y no destruido, y la lógica de la Encarnación es la preservación de la naturaleza humana, las formas de interacción humanas no solo quedan respetadas, sino asumidas por el don del Espíritu/comunión.
Hay varios elementos a superar. Se ha mencionado el clericalismo (y estoy de acuerdo). Pero lo otro es hacer del cristianismo una religión del altar. Sin negar la importancia de la Eucaristía, puesto que es un elemento esencial, simbólico y celebrativo (además que el Señor se hace presente), hay un cortocircuito si se predica sobre la vida, como si fuera un tema de predicación, y no el lugar de experiencia y encuentro con el Señor y la comunidad. Un cristianismo de predicación dominical hace que la misa se transforme en un parque temático, donde por unos minutos o retrocedemos en el tiempo o nos volvermos atemorales. Y la Última Cena estuvo vinculada a la Cruz con una angustia que se desborda en Getsemaní.
El sacerdote debe dejar de ser el animador litúrgico como rol único y estelar y volver a ser el presbítero (anciano/dirigente) que anima a la comunidad recordándole la base de la Fe y sin apagar el Espíritu sino discerniéndolo todo.
Una vez más, tanto las reflexiones como las experiencias fueron muy ricas. Para mi sorpresa, si bien todas fueron excelentes y distintas, me gustó y enriqueció (casi que me convierte evangélicamente) la forma en que se abordó la importancia del Derecho Canónico.
Saludos
Es importante destacar en este tema la importancia de la escucha. Nos esforzamos en nuestras oraciones a Diario para que Dios nos escuche, pero al mismo tiempo hemos sido durante años incapaces de escucharnos a nosotros mismo, creo que ese sentido se han dado pasos importantes y el camino de la sinodalidad es uno de esos pasos importantes. Como Iglesia, como hermanos que somos estamos llamados a amarnos, a solidarizarnos, a relacionarnos y sobre todo a escucharnos y comprendernos, hoy el llamado es a ponernos en los zapatos del hermano y a eso está llamada la Iglesia hoy en día, por eso debemos dar pasos gigantescos para vencer el clericalismo que está atornillado en viejas estructuras que se resisten a abrirse a los nuevos tiempos.
Tenemos que unirnos y escucharnos de lo contrario la Iglesia seguirá perdiendo feligreses que terminan en las filas de los nuevos movimientos religiosos, muchos de los cuales están causando estragos en la sociedad actual.
Hoy como Iglesia estamos llamados a hacer vida la sinodalidad, creo que se han dado pasos importantes pero todavía hay un gran camino que recorrer, sobretodo cuando sabes que hay grupos marginados a los que tenemos que incluir y abrazar como hermanos y creo que como Iglesia tenemos una deuda histórica con estos grupos y sobre todo con las mujeres que le han dado mucho a la Iglesia.
Excelente esta segunda semana. Muy bueno el aporte de Sandra Mazollini. Destaco el aporte sobre relacionalidad y evangelización social. Tambien destaco la reflexión de Rafael Luciani sobre el pueblo de Dios. El aporte de ormand Rish sobre el “sensu fidei” es muy bueno. Lo mismo puedo decir de la reflexión de Dorothen Standler,excelente. El aporte de Carmen peña me ayuda a comprender el avance del derecho canónico y lo mucho que falta para avanzar en esta dimensión. En la última parte: aportes teológicos y pastorales a la sinodalidad, valoro las similitudes del caminar de las Iglesias de Asia, Africa y américa Latina. Muy buena, excelente la reflexión del compañero de Europa. Valoro su honestidad y valentía. Lo de Cateherine me parece excelente y muy valiente. Si ustedes se dan cuenta el mayor porcentaje de abusos sexuales se dan en las Iglesias del primer mundo. Me encanta de Canadá el esfuerzo por caminar con los pueblos originarios.
MARIA DE PAZMARZO 14, 2023 A LAS 5:06 AM
Con un cordial saludo me complace compartir con tod@s mis experiencias con los materiales de la segunda seman del curso. Simplemente, me han parecido EXCELENTES. Yo desconocía los detalles sobre la historia de la Sinodalidad en la Iglesia cristiana y católica por lo cual, las conferencias me han resultado sumamente esclarecedoras. He disfrutado y aprendido inmensamente, sobre todo, con las dos primeras, de M: E. Estévez y S. Fernández, las cuales son sumamente didácticas. A partir de este módulo me quedan mucho más claras algunas propuestas teológicas, como las de Rafael Luciani de «Volver a Cristo» en clave de relectura de las primeras experiencias de sinodalidad cristiana. Por último, la narrativa de las diversas experiencias es sumamente esclarecedora y muestra cómo, la fraternidad generada por el Espíritu Santo en la Iglesia cristiana y católica universal, es hermosa y nos acompaña por este camino de sinodalidad.
Post data… Me ha encantado conocer a San S Cartago!
Gracias de corazón
Fue novedoso y motivante escuchar esas tantas maneras de practicar la sinodalidad y como toda práctica, llamada a tocar la vida de las personas. Aprendí las posibilidades que nos ofrece el actual derecho canónico y me queda claro, que nos queda mucho por caminar para lograr que lo que está escrito se haga practica. Muchas gracias!!
Yo de todos los temas que he visto me quedo con el tema de la mujer .
La aportacion de la alemana me gusto mucho . Quiza me falto que hiciese incapie en Maria Magdalena ,es una mujer que me fascina ,a pesar de que
se le trata de prostituta en algunos textos y en realidad junto con María (la madre de Jesús fueron ,las que levantaron la comunida cristiana ,despues han venido otras que son igualmente necesarias y cuyo nombre no consta en ninguna portada .
Hoy en día y bajo mi experiencia no se termina de reconocer la labor de las mujeres ,que quedan estigmatizadas en las sacristias o en las catdedrales confundiendo con labores domesticas .
Estoy de acuerdo en que el ministerio de la mujer puede tener dos partes el altar y la labor escondida ,y que afortunadamente ,hay mujeres desempeñando labore de responsabilidad .
Felicito a esta señora por su exposicion y sencillez ,nos ha dado una gran leccion .
PAZ YBIEN
CARLOTA
Felicito a todos por sus aportaciones .
Realmente la sinodalidad es un instrumento para poder aportar y colaborar mejor en nuestras parroquias
PAZ Y BIEN
CARLOTA
Muy de acuerdo SOR Mariangel temas importantes y valiosos y como dice la Sra. Catherine Clifford al final de su charla: Es un proceso de renovación y reforma continua del que siempre tenemos necesidad como Pueblo Peregrino de Dios.
Gracias a todos
Interesantísimo ver a través de los temas explicados las diversas formas de vivir la sinodalidad en los distintos continentes, ver también sus tradiciones sinodales. Se puede entender mejor todo el concepto sabiendo cómo lo viven las distintas culturas. Sobre todo, me parece clarificador y consolador tener la certeza que junto a las diferencias culturales está una Iglesia única, la de Jesús, que nos une a todos.
Es un tiempo de gracia para ser fiel almodelo Familia de Dios.
Gracias.
Todos Los temas estan muy interesantes, que Como parte de la Iglesia nos anima a ser verdaderos Cristianos humanos
Interesante todos sus aportes, al igual las exposiciones realizadas durante esta segunda semana donde podemos ver que si podemos caminar juntos a pesar de las diferencias de pensamiento y de diversidad de culturas. Lo mas hermoso es vivir unidos el evangelio y mostrar a ese Jesús vivo que siempre esta en cada uno de nosotros y que nos acompaña en nuestro peregrinar. Continuemos unidos esa tares de evangelizar y de llegar a todos, en especial los más vulnerables
Hola. me han gustado muchos los temas, al usar la palabra “gustado” es porque son temas muy profundos, son temas muy ricos en contenido; que representan la verdadera misión de la Iglesia Universal, pero también de cada individuo que la conformamos. Creo que la Sinodalidad es el verdadero ser de los seres humanos y si me permiten, no solo se hace Sinodalidad en la Iglesia, se debe hacer Sinodalidad en la vida diaria de los seres humanos, en cualquier lugar en donde se encuentre, en cualquier institución que conforme, solo así podremos conformar una mejor sociedad. Es encontrar un verdadero dialogo que respete, construya y forme puentes.
Muchas gracias. Quedo a sus órdenes.
ATENTAMENTE
ENRIQUE RAMIREZ PRADO
Muchas gracias por compartir esta formación teológica y la riqueza de las prácticas sinodales en la iglesia en el mundo. Es muy doloroso caminar y asumir nuestra historia como Iglesia y que hasta la actualidad se sufre el abuso en sus diversas expresiones, La esperanza es la apertura y compromiso laical, que desde su profetismo con la Iglesia podremos ser el Pueblo de Dios, en camino de conversión, de inclusión y peregrinos respetados como Hijos , Hijas de Dios.
Muchas gracias
Temas muy ricos y pertinentes para nuestro caminar en la Iglesia.
Gracías a todos que contribuyeron con los videos.
Dios bendiga!
Agradezco estas reflexiones , invitando a renovar nuestra vida y misión, desde las prácticas de la participación y formación continua, Que ante este camino Sinodal se inician procesos de toma de conciencia de la importancia y papel del Laico en la Iglesia, Ante situaciones de tanto dolor por los abusos ocasionados y la invitación asumir con valentía caminos de transformación eclesial.
Misioneras Marianas
Antes que nada gracias por compartir toda la riqueza del proceso que vive la Iglesia en otros paises, creo que hay esperanza de seguir descubriendo como Jesùs se hace el encontradizo con su pueblo.
Lo primero expresar mi agradecimiento al Boston College, por toda la formación que nos está ofreciendo gratuitamente. Una gran riqueza con la selección de ponentes, y la comunicación de experiencias, que nos amplia el horizonte cercano. ¡Ojala! y nos comprometa mucho más en este camino que hemos iniciado en la Iglesia.
Me han ayudado:
– la relación entre la sinodalidad y la misión de la Iglesia en clave de servicio y discernimiento.
– La Iglesia enseña, también Iglesia aprende porque Escucha.
– El Espíritu no es propiedad de nadie
– La mujer es determinante en el proceso de Evangelización
– El Código de Derecho Canónico ofrece posibilidades aún por desarrollar.
– Si no hay una verdadera conversión, una verdadera actitud de escucha y discernimiento que nos abra a la acción del Espíritu, la sinodalidad y la participación en la vida de la Iglesia no cambiará. Y esto atañe a todos los creyentes, a todos los bautizados.
Ha sido una 2ª Semana muy intensa y de mucha calidad. Gracias
El aporte que Catherine Clifford hace me parece interesante .
Habla sobre las colonias residenciales de los indios en Canada ,subrayando
que son un pueblo con su cultura fe y tradiciones ,pero que han sufrido abusos de tipo psicologico ,fisico y sexual .
En el año 2022 ,el Papa francisco viajo a susutierras para disculparse ,tratando de escuchar y aprender sus propuestas ,a traves de los consejos pastorales de las iglesias locales .
En resumen digo que hay que llegar a la practica de la sinodalidad y la comunion entre los pueblos .
El interés y la preocupación de la Iglesia en general, en hacer un sincero discernimiento de este caminar para llegar a una comunión más profunda que redunde en una misión más fructífera, como nos recuerda el Papa Francisco. La iglesia, como signo de la presencia del Señor en medio de ella y como reconocimiento del valor y la aportación positiva de todos y cada uno de los que la formamos.
Muchas gracias por los aporte y experiencias en este camino sinodal.
Todos los aportes nos inspiran y animan para la vida como religiososos y católicos.
Definitivamente las aportaciones y experiencias compartidas durante esta semana han sido muy valiosas. Nos ayudan a tener una visión más clara y concreta de dónde estamos y cuánto hemos avanzado en este caminar. Las transformaciones no se han dado con la prontitud que uno desearía, pero tenemos esperanzas de que paso a paso logremos alcanzar la meta deseada de una iglesia sinodal.
tal cual… me encanto lo de cristianos humanos, porque aprender eso, es comprender gran parte de la historia cristiana con su errores, y poder subsanar algunos al menos para la construccion de un cuerpo que en comunion y bajo la guia del espiritu aguarde la venida del señor.
Cordial saludos!
Esta plataforma de Formación Contina , con este taller de Historia, teología y practica de la Sinodalidad, esta siendo una experiencia de universalidad y de sentirme Iglesia en el mundo, es bonito escuchar el aporte y las experiencias de los distintos continentes, estamos en camino con deseo grande de ser una Iglesia – pueblo de Dios, cercana, humana… pero siempre es un reto, con todo lo que el mundo nos ofrece. Lo importante es vivir una eclesiología en sinodalidad, que acompaña y esta a favor de los mas frágiles…
Ha sido un curso muy edificante para mi, el que caminemos juntos como lo que somos: la iglesia de Dios, en donde puede haber discernimiento para asi tomar las mejores decisiones es lo ideal, al igual el dejar atras el clericalismo es un gran avance, y que sea una iglesia incluyente donde las mujeres tengamos mas participacion. Asi todos unidos caminando en una sola direccion tendremos y mayor y mejor avance en todas nuestras actividades. Saludos a todos y bendiciones .
mi aporte es relacionado con el 2. del comentario identificandome con el enfasis en la necesidad de dialogo, mas fortalecido con los aportes teologicos pastorales que expuso la Iglesia de Asia, a traves de fr. George Rocheth que subraya el triple dialogo en Asia como parte integrante de la vida: con las culturas, las religiones siendo cuna de tres grandes religiones y dialogo con los millones de pobres, lo cual marca la pluralidad, en la diversidad y la inclusion, razon por la presenta Asia como el mayor aporte de este continente al proceso de sinodalidad. hasta expresar sencillamente pueden decir que la sinodalidad tiene su genesis en Asia. siendo conscientes del lago caminos por hacer, digase clericalismo, transparencia en lo economico, las diferencias entre castas etc.
Tambien la afirmacion de que una Iglesia sinodal es la que escucha, me ha resultado sumanente ejemplar la actitud del ´papa Francisco en su visita a Canada que expresa Catherine Cliffee en los aportes de America del Norte en escuchar primero a fin de comprender la dolorsa experiencia de los indigenas que fueron sistematicamente afectados hasta suprimir su cultura, costumbres religiosas, en las escuelas residenciales. El papa les escucho con gran respeto a estos hermanos que fueron dañados en sus identidades enteras. La practica del circulos de escucha es un espacio privilagiado para aprender a escuchar dentro del camino sinodal.
el aporte de america Latina en el proceso sinodal, porCarolina Bacher, en centroamerica, se han dado bonitas experiencias de sinodalidad en El Salvador, los intentos de aplicar el Vaticano II con la conferencia de Medellin aplicando algunas lineas que del concilio surgieron, y en la preparacion a la conferencia de Puebla en 1979, las comunidades pueblo de Dios participaron a traves de participacion en esa etapa, participaron bastantes laicos, religiosas, experiencias que a veces se han quedado no muy aprovechadas, o cortadas sin continuidad.
con este proceso del camino de sinodalidad que el papa ha lanzado es una oportunidad para fartalecer en nuestro ser de cristianos, nuestro ser Iglesia, pueblo de Dios.
gracias por la riqueza y aprendizaje de los diferentes ponentes y de los interesantes comentarios.
La palabra sínodo viene del griego y su significado es caminar juntos. Si transferimos esa palabra al ámbito de la Iglesia, lo que tenemos es una Iglesia participativa, donde cada uno de los elementos que la conforman cuenta para que la Iglesia siga su camino de guía y de iluminación de todos nosotros bajo la acción del Espíritu Santo y con el apoyo de las autoridades eclesiales.
El proceso sinodal tiene como objetivo fundamental promover una experiencia en todos nosotros, una experiencia que nace desde el discernimiento y de la participación.
El primer sínodo de la historia, según he escuchado en las charlas del curso, se conoce como concilio de Jerusalén, el cual tuvo como objetivo de debate si los gentiles podrían ser aceptados en la comunidad cristiana sin cumplir los requisitos propios de la cultura judía (por ejemplo, la circuncisión o la obediencia a la Ley Mosaica)(Charla de Dª Esteves). A partir de allí, la Iglesia ha tenido un total de 15 asambleas sinodales, de las cuales 14 cuentan con documentos publicados. Cada uno de esos sínodos ha tenido diferentes objetivos importantes y el sínodo de esta etapa 2021-2024 tiene como objetivo es que, nosotros, los feligreses, reflexionemos sobre la importancia de la sinodalidad en la Iglesia especialmente en estos momentos de muchas dificultades históricas. Para el Papa Francisco, este proceso o camino sinodal es una herramienta “fundamental para la Iglesia Católica de este siglo (tercer milenio), ya que caminar juntos (laicos, pastores, obispos) es más fácil decirlo que llevarlo a la práctica que es lo que cuesta realmente”
Este sínodo nos permite a todos reunirnos por igual, nos permite encontrarnos como hermanos y caminar todos juntos como una familia. Las decisiones que tomemos, los consejos que demos serán fundamentales, especialmente sobre como la Iglesia debe adaptarse a los nuevos tiempos sin perder nunca su objetivo principal, cual es, ser la casa de Dios, un lugar de refugio del desamparado, alimento del afligido y fuente de alegría. Es también importante resaltar unas palabras que Jesús nos digo. “Cuando 2 o más personas se reúnan en mi nombre, Yo estaré con ustedes”. Cada vez que nos reunimos en las asambleas sinodales, debemos saber que no estamos solos, que Dios está allí, escuchando a sus hijos, guiándonos con Su Espíritu sSanto, para que nuestros pensamientos y las palabras que salen de nuestra boca, vengan de la fuente de la sabiduría de Dios, tal como Jesucristo nos enseñó.
Muy agradecida por esta oportunidad ofrecida por Boston College. Todo el temario de la segunda semana ha sido muy bueno y enriquecedor. Es una invitación a profundizar en el proceso de la sinodalidad que ya se está iniciando en casi toda de la Iglesia, respuesta al compromiso del Papa Francisco a poner en marcha un proceso de reforma en nuestra Iglesia.. Las experiencias compartidas permiten una visión más amplia de la diversidad de los continentes y los grandes retos enfrentados en algunos de ellos. No se puede sin quedarse conmovida por la realidad vivida por los indígenas de Canadá sobre todo, y alegrarse del valor de los círculos de escucha.
En total el movimiento del Espíritu se palpa en mucho que está pasando y da gusto que estamos rescatando mucho que se propuso en vat II.
Gracias a todos y todas los expositores por la reflexión surgiendo a raíz de sus aportes valiosos en los videos.
Gracias por los temas tratados en esta 2 semana, fueron abordados desde la realidad que vive cada país en su Iglesia particular. Los aportes pastorales y sinodales desde una Iglesía Pueblo de Dios donde se ve el compromiso de todos los bautizados con los hermanos pobres y excluidos. Me gusto mucho y conocí cosas que no sabía.
Muy buena la “teología de la sinodalidad”. Gracias por tantos y variados aportes de todos los continentes (todo un signo de sinodalidad). Me ha gustado lo que nos ha dicho el Prof. Christian Bauer, hablando desde Europa. Él nos ha recordado que el abuso sexual de la Iglesia tiene relación directa con el clericalismo y el abuso de poder que conlleva. Incluso habla de un “pecado estructural”, institucional de la Iglesia. A mayor clericalismo mayor abuso de poder, a mayor sinodalidad menos clericalismo. Que Dios nos ayude a purificarnos y emprender este duro pero seguro camino de la sinodalidad.
Muchas gracias por los aportes. Es una riqueza todos los aportes dados sobre el tema y las experiencias que nos impulsan a seguir caminando como Iglesia.
Nuestras celebraciones dominicales cada vez son menos numerosas, la juventud está masivamente ausente, y los cristianos de frontera que saben que su papel está precisamente en el mundo, para transformarlo desde el Evangelio, se sienten en demasiados casos huérfanos y no acompañados ni sostenidos por sus iglesias locales …
Ante este panorama, la sinodalidad a la que se nos invita, vivida con autenticidad, es la solución para que todos crezcamos en corresponsabilidad, acabemos con los dogmatismos y el clericalismo y hagamos verdaderamente a todo el Pueblo de Dios protagonista de la misión que como cristianos estamos llamados a realizar en pro de la construcción de un mundo y una realidad acorde con el Plan de Dios.
Felicidades por el curso y las reflexiones compartidas.
Miguel.
Motril (Granada) España.
Buenas tardes, gracias por ayudarnos a crecer en consciencia.
Soy una mujer que está des-aprendiendo y desea convertirse en una persona que camina con hermanas/os hacia la casa del Padre.
Hacen falta, como en Canadá, “esos círculos sagrados de escucha” para reconciliar y sanar.
Hace falta una Iglesia humilde que escuche y honre los “dones” de todos los bautizados.
Gracias por todos los aportes que nos animan a vivir un proceso de conversión sinodal. El ubicarnos en la eclesiología del Vaticano II, desde una perspectiva relacional que nos permite reconocernos todos los bautizados, como ciudadanos de primera y no de segunda clase en la iglesia, y, valorar los aportes específicos que cada uno puede dar, implica una conversión estructural, pues al ubicarnos en los diferentes contextos, se va descubriendo la posibilidad de nuevos ministerios o servicios que necesitan tanto la comunidad eclesial como el contexto social, político, geográfico etc., en que se vive.
El clericalismo ha sido causa de grandes males y patologías en la iglesia. El hecho de tomar conciencia de ello y decidirnos a caminar como discípulos misioneros promoviendo la comunión y la participación de todos, no tiene vuelta atrás, si queremos ser fieles al evangelio de Jesús y a los clamores del hoy de nuestra historia.
Muchas gracias por la oportunidad de participar de este evento de Sinodalidad donde entiendo y participo de los conocimientos y realidades qué viven los ponentes para construir la Iglesia que queremos. También tiene mucha resonancia para mi, con la gracia de Dios, aumentar los conocimientos de Sinodalidad y tener la capacidad de conversión, comunión, unidad para la solidaridad y participación corresponsable en la misión en mi Iglesia del s. XXI. Donde cada bautizado pueda aceptar y asumir dando nuevo significado y sentido sinodal por la luz, por el vestido nuevo, por el perdón y por el agua viva qué recibió desde el bautismo. y lo recibió del Dios Trinitario, como imagen suya al mundo, mientras caminamos juntos al cielo desde aquí y ahora, en fraternidad y alegría por la Buena Nueva.
Me doy cuenta en estos procesos sinodales se viven muchas bendiciones, pero a su vez tambien se reabren heridas que causan dolor y sufrimiento y me.sospecho que esa es la causa que hay varios detractores de la sinodalidad, ese caminar juntos, porque en ese caminar juntos hay que ponerse en los zapatos del que camina a nuestro lado y ahí se puede encontrar mucjo dolor y no estamos listos para asumir esas vosas que vomo personas, como sociedad y como Iglesia y cristianos nos hemos equivocado. Hay que querer ponernos en marcha y dejar el Espíritu Santo nos acompañe y nos sane para esa escucha sin juzgar. Muchas gacias por poner a nuestro alcance estas experiencias tan enriquecedoras.
Muchísimas gracias por todo el material ofrecido, por todo lo compartido. Que sigamos abiréndonos al Espíritu para tomar en serio el sensus fidei, algo clave en el camino sinodal.
Me parece muy interesante escuchar las diferentes acciones de Sinodalidad que se han realizado en los diferentes continentes sobre todo en seguimiento de las indicaciones del Papá Francisco de una iglesia en salida
Las acciones de Sinodalidad realizadas en Canadá y Europa demuestran una actitud de reconciliación de la iglesia con el pueblo, el Papá Francisco nos invita a seguir el ejemplo de Jesús de amor al prójimo y humildad y nos invita a pedir perdón y también a perdonar
Entrar en tiempos de la sinodalidad es un reto, hay un largo camino por seguir Debemos despertar ante el llamado de conversión que nos hace Dios y no quedarnos tranquilos a tanta injusticia y corrupción que hay en la actualidad.
Gracias todas las personas que han puesto empeño en formarnos y comprender que la iglesia debe estar en camino de renovación sin perder el CENTRO que es Jesús. Todos estamos llamados a caminar juntos a apoyarnos y amarnos como hermanos que somos todos En Cristo, Una sola Iglesia y un Sólo Corazón,
Muy interesante todo lo presentado en esta segunda semana para ampliar la visión de lo que es la sinodalidad y percibir lo específico de cada continente. La experiencia de Canadá, vivenciando los círculos de Escucha suponen un cambio que permite avanza en en el camino de la la Sanación y la Reconciliación.
En Asia, el subrayado de la práctica común del diálogo, en un contexto de pluralidad de culturas y religiones, muestra en el camino sinodal la importancia de partir y cultivar los aspectos interreligiosos e interculturales.
En América Latina, a destacar el sínodo de la Amazonía, donde se vio la necesidad de reforzar el cuidado ambiental para proteger la tierra como nuestra casa común.
Dolorosa la temática presentada por Europa con todo lo relacionado con el abuso sexual,
La vivencia de Iglesia como familia de Dios en África es lo que mñas me ha impactado.
Muy buen trabajo. Gracias
Muy de acuerdo, que el señor siga instruyendo corazones, que nos ayuden a seguir preparando la vida y el corazón.
Muchas gracias por todo lo impartido, ayuda a seguir creciendo en la fe y a seguir conociendo aquello que solo escuchamos y que muchas veces decimos si, sin saber el verdadero contexto, sigamos instruyendo el alma y la vida en una verdadera sinodalidad. MIl gracias
Queridos hermanos:
¡Muy enriquecedoras las experiencias sinodales en cada continente! Compartir estas experiencias nos recuerdan lo importante de la unidad en la diversidad y nos redescubren la gran riqueza de dones y carismas que el Espíritu concede a su Iglesia!
Saludos desde Argentina!
Estos videos son un aporte significativo para esta reflexión en camino sinodal, me llama la atención las experiencias compartidas, que en el transfondo ponen un contexto que permea la vida eclesial, en una relidad que nos pone de frente a nuestras luces y sombras, una llamado interesante a nivel personal, comunitario a hacer vida el Evangelio, cada contienente tiene elemntos especifico pero al fnal la iglesia es una y el llamado es el mismo a construir y aporte desde lo particular para enriquecer lo global de nuestra iglesia.
Estimados compañeros y profesores: este curso es magnífico, y le da voz a muchas mujeres que en caso contrario son silenciadas en la Iglesia. Creo que hay que lograr que se produzcan estos cambios y también toma de conciencia de nuevas prácticas que nos permitirán a participar a todos y todas en la Iglesia y detendrá la huida de muchos hacia otros cultos o hacia formas no creyentes de vida. Muchas gracias. Adela Perez del Viso, de San Luis, Argentina.
Me ha parecido super interesante ver cómo se está viviendo la sinodalidad en los diferentes continentes. Conocerlo hace que nos sintamos más hermanados y veamos que todos caminamos hacia un mismo objetivo. Así vamos construyendo el Reino.
Estoy muy agradecida con cada comentario de mis antecesores al mismo tiempo agradezco de todo corazón a cada uno de los expositores, siento que el proceso sinodal es un camino que se abre a un nuevo horizonte, en donde tanto sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos comprometidos (pueblo de Dios), podamos caminar juntos hacia el cuento de tantas personas que aun no conocen de Dios y de aquellos que conociéndolo se han alejado del camino. Me agrada a la vez que están tomando muy en cuenta la voz de nosotras las mujeres.
Definitivamente aquí en mi país Honduras se necesita mucho poner en practica esta invitación de el Papa Francisco hacia un caminar juntos, guiados por el Espíritu Santo.
Estamos de acuerdo Hermín por su comentario claro y enriquecedor, especialmente en esto: “reconocer la pluralidad y universalidad, ser una Iglesia que escucha que es más que oír para saber,…”
Gracias a todos los conferenciantes y a los participantes con sus aportaciones que nos aclaran y enriquecen.
Estoy de acuerdo con Cony, me parece que estos cursos nos ayudan tanto a los laicos como al clero a crecer espiritual e intelectualmente para luego ponerlo en práctica, así como lo dijo el papa Francisco “La fe es un don y un acto que nos concierne personalmente, pero Dios nos llama a vivir esta fe, en una familia llamada Iglesia” fin de la cita. Es por esta razón que yo como persona comprometida con mi iglesia, debo llevar estos conocimientos de la sinodalidad a la práctica, donde caminar juntos sea mi prioridad, pero me doy cuenta que no podemos salir al mundo, sin antes nosotros como siervos de Dios comprometidos practicar estos procesos sinodales, para luego salir a lo que Jesús nos manda cuando nos dice: “Vayan, pues, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos. bautícenlos en el Nombre del Padre y de Hijo y del Espíritu Santo, y enséñenles a cumplir todo lo que yo les he encomendado a ustedes. Yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin de la historia.” Mateo 28: 19-20, estas fueron las ultimas palabras de Jesús ante de la ascensión al cielo. Y nosotros como bautizados estamos llamado ha cumplirlas.
Estoy de acuerdo con Cony, me parece que estos cursos nos ayudan tanto a los laicos como al clero a crecer espiritual e intelectualmente para luego ponerlo en práctica, así como lo dijo el papa Francisco “La fe es un don y un acto que nos concierne personalmente, pero Dios nos llama a vivir esta fe, en una familia llamada Iglesia” fin de la cita. Es por esta razón que yo como persona comprometida con mi iglesia, debo llevar estos conocimientos de la sinodalidad a la práctica, donde caminar juntos sea mi prioridad, pero me doy cuenta que no podemos salir al mundo, sin antes nosotros como siervos de Dios comprometidos poner en practicar estos procesos sinodales, para luego salir a lo que Jesús nos manda cuando nos dice: “Vayan, pues, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos. bautícenlos en el Nombre del Padre y de Hijo y del Espíritu Santo, y enséñenles a cumplir todo lo que yo les he encomendado a ustedes. Yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin de la historia.” Mateo 28: 19-20, estas fueron las ultimas palabras de Jesús ante de la ascensión al cielo. Y nosotros como bautizados estamos llamado ha cumplirlas.
Desde el Concilio Vaticano segundo y antes se le ha querido dar una trasformación a la Iglesia, iniciando desde la parte jerárquica clerical, un despertar de nuevas oportunidades de dar a conocer a nuestro Señor Jesucristo, por tanto siempre hemos estado en sinodalidad, en salida, se ve los diferente discurso de los Papas, siempre el mensaje ha estado presente, caminar juntos, en fraternidad, unidos, desde Cristo, la oración, ser misioneros, desde abajo, desde las periferias. El mensaje se ha pasado de mil, formas, que es lo que nos ocurre, que no tenemos una verdadera conversión y es lo que no ha permitido avanzar con una Iglesia ams del pueblo que de los cleros. Agradecida por estos temas que nos actualiza y ayuda a alimentar nuestro espíritu.
Me llena de esperanzas lo aprendido, me reafirma en mis convicciones, pero me preocupa el clericalismo de agentes pastorales que no ven con buenos ojos este proceso, tienen miedo a los cambios que pudieran hacerse en la iglesia, las propuestas que han surgido les parecen peligrosas en definitiva creo que no son dóciles a la acción del Espíritu Santo que habita en nosotros y nos impulsa a ser agentes pastorales atentos a lo que quiere Dios de nosotros en el tiempo presente, que espera de nosotros una conversión y que no seamos un impedimento para atraer a toda esa gente que no está en nuestra iglesia, ya sea porque la abandonó o porque no le atrae el mensaje que estamos entregando.
ENRIQUE JOSÉ RUBIO PICÓ
Cada vez me gusta más el curso y, por ende, el tema de la sinodalidad. Asoma una Iglesia diversa que siempre ha estado ahí. Percibimos una y otra vez los males causados por el clericalismo y su consecuente principal, los abusos a menores por parte de “perpetradores” eclesiásticos. El “tribalismo asimétrico”, más vinculado a la derecha es un concepto interesantísimo que debemos escrutar en nosotros mismos para no encerrarnos en nuestros grupos. Pensar que nuestras liturgias catòlicas puedan inculturarse en tantas culturas ricas en tradiciones e historias es fascinante. Estamos en un kairós que muchos anhelaban ver y no vieron.
Muchas gracias a lis conferencitas, me ayudaron a ver con mayor amplitud este tema de la sinodalidad, y cómo está presente en cada espacio, hasta en el área de lo canónico. Espero qye lo que escuche mecayuda a construir y vivir mi fe de forma sinodal, escuchando al Espiritu Santo y a los hermanos como nos lo proponía el Papa Francisco.
La escucha es esencial para la sinodalidad, como nos dice Carmen. Muy de acuerdo con ella.
Todo este material nos ayuda no solo a actualizarnos sino a sensibilizarnos y tomar conciencia de la sinodalidad en la Iglesia.
Un curso muy interesante. Los ponentes muy buenos y las experiencias de los différentes continentes tambien. Gracias
En esta segunda semana, que ha sido muy rica y con nuevas perspectivas y conocimientos, he podio captar que el camino/proceso de la sinodalidad no ha surgido de “generación espontánea” sino que, como todo proceso humano y social, se va construyendo a la luz de la conciencia que se va teniendo sobre esta dimensión tan importante hoy en la vida y misión de la Iglesia.
Creo que la discusión ya no puede estar si abrimos o no abrimos, participamos o no participamos, sino en el “cómo” se dará hoy tal actitud dada la complejidad de nuestras comunidades hoy. Lo que sí es cierto es que la actitud fundamental personal no puede faltar: una apertura a la escucha y un sentirse “corresponsable” de la incidencia del Evangelio en nuestra vida humano hoy…
Muy conforme con las ilustraciones de los expositores de los diferentes temas y muy apropiados las experiencias volcadas desde los distintos continentes. He descubierto experiencias que desconocía de América Latina
La verdad este modulo me pareció excelente, todo el contenido esta muy entendible, los vídeos muy bien traducidos que nos ayudan a comprender mas este curso y sobre todo el de las experiencias que nos ayudan a ver como se camina en cada continente y eso motiva a caminar juntos como Iglesia.
Gracias, por todos vuestros aportes.
Me gustó mucho la teología (eclesiología) de la sinodalidad. Me parece muy importante avizorar que la sinodalidad es al servicio de la misión; todo el pueblo de Dios es objeto de la misión, todo sujeto es misionero; un ejercicio de diálogo profético, donde converge el TESTIMONIO Y EL ANUNCIO.
Muy iluminador el documento de la CTI, el desarrollo del sensus fidei, el aporte de las mujeres al proceso sinodal y la parte canónica.
Creo que todo esto no lo hubiera entendido sin los videos de la práctica de la sinodalidad.
La verdad que muy enriquecedora y comprometedora esta seman.
Muchas gracias
Los temas y ponentes profundizan y enriquecen el curso que seguimos en el 2022. La primera parte que acabo de concluir, me permite valorar la consistencia y profundidad, de los temas desarrollados, permitiéndome percibir el clima propio de la diversidad de diferentes expectativas y experiencias eclesiales con luces y sombras, que sólo podía vivirse en la sinodalidad. Los temas tratados son de palpitante actualidad eclesial en cada Continente y Región. Es diferente cómo los tratan los medios informativos que inducen a formarse criterios erróneos y cómo en el curso con nuestros Maestros y Maestras los hemos reflexionado con la mayor autenticidad, para analizarlos con respeto y comprenderlos con espíritu Sinodal. Sin duda es un aprendizaje valioso que me permite valorar las opiniones expresadas en este foro por todos los hermanos y hermanas.
Me quedo con la impresión que la sinodalidad es vida en la Iglesia, porque hay dinamismo, movimiento <, energía por lo tanto es vida.
Muchas gracias a todos los exponentes por laclaridad, entusiamo . Contagian.
Que importante es tener una iglesia que une, que escucha, que interactúa. Gracias
Muchas gracias por la segunda semana. He percibido la riqueza de las exposiciones de Sandra Mazzolini, Rafael Lucianni, Ormond Rush, Dorothea Sattler, los testimonios de la experiencia de la Sinodalidad en Asia, Europa, África, Canadá y América Latina. Después de repetir las exposiciones y reflexionarlas para empoderarme de las principales enseñanzas, puedo inferir que como comunidad global, tenemos como Iglesia las misma luces y sombras. No podemos señalar de manera absoluta que solo existen problemas de clericalismo, de imposición violenta de la fe, de desprecio a la cultura y religiosidad de las comunidades nativas, de racismo, de abuso sexual, etc. en unas Iglesias nacionales y otras no. Los desafíos son universales. El curso nos ayuda a comprender que la Sinodalidad, guíados por el Espíritu Santo nos anima orar juntos, y buscar el camino que Dios espera que sigamos para transformar nuestra Iglesia con una espiritualidad renovada con la energía que animó a los discípulos y apóstoles de Jesús para anunciar al Kerigma retomando la dinámica y compromiso de construir el Reino de Dios desde aquí y ahora que nos animó NSJ desde siempre. Como bien señala el Papa Francisco, tenemos que transformar las grandes injusticias económicas, políticas, sociales y culturales para que la humanidad pueda vivir con la dignidad de hijos de Dios, respetendo sus tradiciones, creencias y opciones religiosas.
La sinodalidad describe el camino que se debe seguir para promover la catolicidad de la Iglesia en el discernimiento de los caminos
La Sinodalidad es una dimensión constitutiva de la Iglesia, según el papa Francisco o, dicho de otra manera, “la sinodalidad es una dimensión ontológica de la constitución eclesial”. Su base se fundamenta en la real igualdad y dignidad de todos los creyentes en virtud del bautismo y su universal vocación a la santidad. Su referencia fundamental es el sacerdocio común bautismal, a cuyo servicio se encuentra el sacerdocio ministerial por estar ordenados el uno al otro y distinguirse esencialmente (cf. LG 10).
Las diversas formas de expresión sinodal se concentran en tres: la participación, implicación y corresponsabilidad de todo el pueblo de Dios en la vida y la misión de la Iglesia; la colegialidad episcopal entre los obispos entre sí, y entre estos y el Obispo de Roma; y la cooperación de los presbíteros con su obispo. Y, finalmente, el modo de intervención sinodal se sustancia en la capacidad del “aconsejar en la Iglesia” que hace posible la “singular unidad de espíritu o acuerdo común (conspiratio) entre pastores y fieles” (DV 10).
Las consultas que han precedido a las últimas asambleas sinodales no han sido meras exploraciones sociológicas sobre el status questionis de los temas sometidos a reflexión, sino un sincero intento de caminar juntos escuchando el sensus fidelium de cara a realizar un verdadero discernimiento evangélico de la voluntad de Dios a la luz de los signos de los tiempos. De ahí se deduce una revalorización de la escucha, la implicación y la participación, que son los pilares fundamentales de una Iglesia sinodal.
La Iglesia de la sinodalidad es la Iglesia que habla y escucha, dialoga y discierne, anuncia y testimonia, celebra y sirve, se implica y se compromete: “Una Iglesia sinodal es una Iglesia participativa y responsable”.
Caminaremos hacia una Iglesia cada vez más sinodal en la medida en que recordemos y hagamos efectivos varios aspectos teológicos fundamentales:
a) la igualdad carismática de todos los bautizados;
b) el fundamento trinitario de la comunión;
c) el doble principio cristológico y pneumatológico que confiere a la Iglesia una estructura sinodal y jerárquica al mismo tiempo;
d) la comprensión de una sinodalidad dentro de una eclesiología eucarística; y e) la relevancia del sensus fidei / sensus fidelium en orden a un ejercicio sinodal de la autoridad en la Iglesia, a partir de la comunicación, la confianza, la escucha y la consulta.
Finalmente, haremos de la sinodalidad un verdadero modus Ecclesiæ en la medida en que vivamos cada uno de los aspectos de la Iglesia (comunión, organización, liturgia, misión) desde lo que se ha venido en llamar el alma de la sinodalidad que consiste en la confianza de todos los miembros de la Iglesia —pastores y laicos— en que es posible debatir con paz y honestidad cada uno de los temas candentes propios de la misión eclesial, porque toda la Iglesia sabe y cree que la Palabra de Dios la orienta y que su Santo Espíritu la ilumina para que pueda hallar el consenso en la línea de la tradición de la fe.
Muchísimas gracias por todo el material ofrecido, por todo lo compartido.
Muy interesante y esperanzador
Es de suma importancia buscar y señalar las implicaciones concretas, pastorales, de la sinodalidad. De no hacerlo, toda la reflexión, toda la teoría, por muy bella y majestuosa que fuera, no serviría de nada. En este sentido es que me pareció enriquecedor escuchar las perspectivas y preocupaciones pastorales de otras latitudes.
Sinodalidad, nueva Iglesia en camino, muy interesante todas las reflexiones, invitan a replantearme mi hacer y que hacer en como laico en la Iglesia, partir de una reflexión personal, de como vamos caminado y hacia donde queremos ir.
Excelente todo, a lo único que te motiva es a participar mas activamente en tu iglesia local, sigan así!
LA segunda semana muy rico todos los contenidos, al abrdar los problemas de hoy vivenciados por los fieles y el convite a seguir constriyendo una Igresia cada vez mas sinodal.
Excelente comprension y explicación de los temas hacia un camino futuro en el que la sinodalidad sea el camino para una renovación y reforma continua de la Iglesia.
La sinodalidad es un caminar juntos que todavía está empezando y del cual no sabemos adonde nos va a llevar. Sin embargo, nos toca involucrarnos con esperanza y fiandonos en el Espíritu, que es además un Espíritu de creatividad siempre novedosa…
Muchas gracias por estos cursos. Ellos nos permiten tener una visión sobre nuestra labor laical como parte del Pueblo de Dios. Es preciso que sepamos renovarnos para que el proyecto que inició Jesús siga vigente y, a pesar de los obstáculos, que muchas veces nosotros mismo nos ponemos, porque el tentador actúa de diversas formas, empecemos a ser las manos y la voz del proyecto del Reino en cada porción de la viña en que nos encontremos. En sinodalidad, desde los diferentes puntos de vista que tenemos, con nuestra diversidad cultural y de dones, seamos el grano de mostaza que va creciendo. Muchas gracias
muy iluminador el tema de la relacion de la mision con la sinodalidad. el elemento dialogico, relacional, la apeertuar a la alteridad … en la Luz de la Trinidad
Es una excelente propuesta. Cada uno de los exponente, son la expresión de la Iglesia de Dios. Cuanta sabiduría y cuanto hay de reconocimiento del amor de Dios. Ayuda a formarnos en la escuela de María.
Muy interesantes los temas, en particular puedo decir que en mi diocesis es muy dificil implementar cualquier tema de sinodalidad, no pierdo las esperanzas que en algun momento podamos vivencias y ser parte de este proceso.
Son muchos los desafios del caminar eclesial en este tiempo. La sinodalidad no es uniformidad, es más bien, pluralidad. vivimos en un mundo diverso que debe encontrar caminos comunes. la humanidad no es ella sola, y menos los privilegiados. Es tambien la casa común, los más pobres y vulnerables y aquellos que por las injusticias son los descartados del sistema. en medio de todo ello, hay caminos de esperanza en pequeñas comunudades de fe que alientan a seguir adelante.
Las diferentes experiencias expresadas, nos muestran la importancia de la escucha: de las penas, de los logros, de la realidad, de los ideales; que nos lleven a caminar como Iglesia, presencia de Dios en el mundo, como ejemplo de humanidad y de servicio.
Hoy más que nunca es necesario a caminar juntos con todos los miembros de la iglesia, rompiendo estructuras de clericalismo , vale la pena ser y actuar una iglesia familia como la familia Trinitaria de Dios.
Que primeramente nos evangelizamos a nosotros mismos para salir a evangelizar hacia fuera con respeto y apertura al cambio de una iglesia sinodal en salida.
Hoy más que nunca es necesario a caminar juntos con todos los miembros de la iglesia, rompiendo estructuras de clericalismo , vale la pena ser y actuar una iglesia familia como la familia Trinitaria de Dios.
Que primeramente nos evangelizamos a nosotros mismos para salir a evangelizar hacia fuera con respeto y apertura al cambio de una iglesia sinodal en salida.
Buenas noches, me siento agradecido por esta experiencia de formación y reflexion sobre una nueva forma de ser Iglesia. La sinodalidad va ayudarnos a discernir juntos por donde Dios quiere que caminemos y como caminar juntos. Dios nos anima a vivir y participar del proceso dentro da nuestras Iglesias locales.
La Sinodalidad el manifestacion de Dios en la vida de la Iglesia. La riqueza de la Iglesia es inmensurable y todos somos partes y tenemos mucho para aportar.
La Sinodalidad es un concepto fundamental en la vida y misión de la Iglesia. Se refiere a un modo de ser Iglesia que articula comunión, misión y participación. Es interesante los aporte históricos sobre este tema que es muy actual en la vida pastoral de la Iglesia.
Ha sido una experiencia muy interesante escuchar las experiencias en los distintos continentes y con experiencias y situaciones muy concretas.
Me llama positivamente la atención, como el mismo Espíritu trabaja haciendo Iglesia desde la realidad de los pueblos que peregrinan desde sus propias culturas. La experiencia de Canadá con las culturas indígenas me ha llamado de una manera especial la atención. La visita del Papa Francisco fue un kairos para todos los puebles indígenas. Los ejemplos de América Latina me da mucho que aprender…
Que en nuestro peregrinar como Iglesia e iglesias locales podamos ponernos en marcha hacia una Iglesia más sinodal!
Antes que nada Quiero agradecer a Boston College El Gran acierto de llevar a cabo estos cursos en línea a todos los participantes inscritos en él en opinión muy personal Creo que muchas personas se perdieron de este gran evento porque quizás no tuvieron tiempo no se enteraron de dichos cursos que son excelentes bien Hablando sobre el sinodo antes del Papa Francisco los inodos eran única y exclusivamente o tradicionalmente de obispos con el Papa Francisco se incluye a los laicos que ahora tienen voz y voto porque la iglesia Somos todos los carros en la iglesia se van pero los fieles siempre permanecen A diferencia de los sinodos anteriores este objetivo no es abordar un tema en particular sino permitirnos llegar a ser lo que Dios nos Llama a ser como iglesia y la sinodalidad significa caminar juntos una iglesia en salida ir a buscar a los más necesitados no quedarnos en nuestras parroquias en la torre de Marfil esperando a que lleguen las personas sino salir a buscarlas y decirles qué necesitas Qué ocupas eres importante para nosotros venimos de la santa iglesia católica la madre iglesia también el sinodo no es nada más hablar de sinodalidad sino de caminar en la sinodalidad y ponerla en práctica desde que inició el sínodo en nuestra parroquia La del señor San José en Los Mochis Sinaloa en la diócesis de Culiacán nuestro párroco yamil Armando Rodríguez Machado nos habló de este sinodo y lo que el Papa Francisco deseaba y quería de nosotros y nos pusimos en marcha creo que estamos haciendo un excelente trabajo lo que Debemos entender es aprender a escuchar a nuestros hermanos y dejarlos hablar de sus necesidades de lo que ellos quieren y desean no nada más ser nosotros los que hablamos y ellos a la escucha ahora es diferente tenemos que escucharles Y tratar de apoyarles en sus necesidades y realmente esto nos llamará a cambiar nuestras formas de hacer las cosas a cambiar como iglesia y acompañarnos todos juntos guiados por el espíritu santo porque sin espíritu santo no hay nada y sobre todo acompañarnos en la oración por eso decimos Ven Espíritu Santo A tu iglesia reúnenos y guíanos llévanos por lo de tú deseas que caminemos como la iglesia peregrina que somos enséñanos a escuchar a nuestros hermanos Haz que el fuego de tu amor arde en nuestros corazones para que podamos avanzar juntos como iglesia acompañando a todas las gentes en todos los lugares en un camino común y como decía nuestro Obispo Jonás solos podemos avanzar más rápido pero todos juntos llegaremos más lejos amén