Excelente esta profundización, se fortalece el sentido del Sensus fidelis, se llega a la comprensión de las diferentes fases por las que la Iglesia ha pasado.
Hay un aspecto que me parece se tiene que seguir insistiendo en lo la recepción de la Iglesia sinodal, o pueblo de Dios, desde la realidad de una cultura concreta, del lugar teológico y existente, donde nos encontremos. La necesidad de ir fortaleciendo este aspecto de la evangelización .
la necesidad de seguir insistiendo en los cambios mentales y culturales, es significativo cuando se encuentra como cuando se cambia un párroco, se recibe con lo que tiene y se le hace una recepción de cuentas y se aclara que se tiene que seguir aportando a la Curia diocesana las cuotas , la necesidad de seguir profundizando en la misión, no solo del sacerdote sino también de los laicos.
Liliana Restrepo
En este módulo de modelos y prácticas de escucha encontramos diversas alusiones a una cierta participación general de los distintos tipos de miembros del pueblo de Dios con compromiso transformador teniendo principios de:
Armonía: Unidad y diversidad
Corresponsabilidad: Participación y dialogo
Reciprocidad: Cultivar, proteger y vigilar
Globalidad: intuición de todo
Se puedes aplicar dinámicas comunicativas ministerial para rescatar el precioso tesoro teólogo de la escucha donde cada sujeto aporta algo según su modo de ser (LG 31). De este modo, “cada miembro está al servicio de los otros miembros… [de modo que] los Pastores y los demás fieles están vinculados entre sí por recíproca necesidad” (LG 32).
Gladys Rojas Peña
La categoría eclesial del pueblo de Dios, me motiva a crecer en el sentido de la fe que ha de dar sentido y razón a los esfuerzos que emprendemos para fortalecer la sinodalidad en nuestras comunidades eclesiales.
HUGO OTTO PAZ DUARTE
MUY BUENA SÍNTESIS MUY CLARA DE TODO LO QUE HEMOS VENIDO APRENDIENDO DESDE QUE INICIAMOS ESTE DIPLOMADO. EL PUNTO DE PARTIDA ES EL MOVIMIIENTO DE JESÚS QUE, COMO FRUTO DE SU DISCERNIMIENTO EN EL DESIERTO, FUE LLAMAR A UNA COMUNIDAD DE DISCÍPULOS Y DISCÍPULAS PARA FORMARLOS COMO COMUNIDAD Y REVELARLES EN EL CONTEXTO DE LA PALESTINA DEL SIGLO I, EL PROYECTO DE DIOS PADRE PARA SU PUEBLO Y EL MUNDO ENTERO: EL RAINADO DE DIOS…ME PARECE QUE ALLÍ INICIÓ TODO, EN LA ENCARNACIÓN DEL VERBO EN LA HISTORIA Y EN UNA CULTURA Y DESPUES DE SU RESURRECCIÓN EL ENVÍO DE SU COMUNIDAD CON LA MISMA MISIÓN QUE DIOS LO ENVIÓ A ÉL, EN CORRESPONSABILIDAD Y EN SERVICIO…
Excelente esta profundización, se fortalece el sentido del Sensus fidelis, se llega a la comprensión de las diferentes fases por las que la Iglesia ha pasado.
Hay un aspecto que me parece se tiene que seguir insistiendo en lo la recepción de la Iglesia sinodal, o pueblo de Dios, desde la realidad de una cultura concreta, del lugar teológico y existente, donde nos encontremos. La necesidad de ir fortaleciendo este aspecto de la evangelización .
la necesidad de seguir insistiendo en los cambios mentales y culturales, es significativo cuando se encuentra como cuando se cambia un párroco, se recibe con lo que tiene y se le hace una recepción de cuentas y se aclara que se tiene que seguir aportando a la Curia diocesana las cuotas , la necesidad de seguir profundizando en la misión, no solo del sacerdote sino también de los laicos.
En este módulo de modelos y prácticas de escucha encontramos diversas alusiones a una cierta participación general de los distintos tipos de miembros del pueblo de Dios con compromiso transformador teniendo principios de:
Armonía: Unidad y diversidad
Corresponsabilidad: Participación y dialogo
Reciprocidad: Cultivar, proteger y vigilar
Globalidad: intuición de todo
Se puedes aplicar dinámicas comunicativas ministerial para rescatar el precioso tesoro teólogo de la escucha donde cada sujeto aporta algo según su modo de ser (LG 31). De este modo, “cada miembro está al servicio de los otros miembros… [de modo que] los Pastores y los demás fieles están vinculados entre sí por recíproca necesidad” (LG 32).
La categoría eclesial del pueblo de Dios, me motiva a crecer en el sentido de la fe que ha de dar sentido y razón a los esfuerzos que emprendemos para fortalecer la sinodalidad en nuestras comunidades eclesiales.
MUY BUENA SÍNTESIS MUY CLARA DE TODO LO QUE HEMOS VENIDO APRENDIENDO DESDE QUE INICIAMOS ESTE DIPLOMADO. EL PUNTO DE PARTIDA ES EL MOVIMIIENTO DE JESÚS QUE, COMO FRUTO DE SU DISCERNIMIENTO EN EL DESIERTO, FUE LLAMAR A UNA COMUNIDAD DE DISCÍPULOS Y DISCÍPULAS PARA FORMARLOS COMO COMUNIDAD Y REVELARLES EN EL CONTEXTO DE LA PALESTINA DEL SIGLO I, EL PROYECTO DE DIOS PADRE PARA SU PUEBLO Y EL MUNDO ENTERO: EL RAINADO DE DIOS…ME PARECE QUE ALLÍ INICIÓ TODO, EN LA ENCARNACIÓN DEL VERBO EN LA HISTORIA Y EN UNA CULTURA Y DESPUES DE SU RESURRECCIÓN EL ENVÍO DE SU COMUNIDAD CON LA MISMA MISIÓN QUE DIOS LO ENVIÓ A ÉL, EN CORRESPONSABILIDAD Y EN SERVICIO…